El Málaga empató con el Valladolid pero los jugadores cumplieron con su cometido en cuestiones esenciales para competir. Hubo también momentos estelares de Dani Martín y detalles de calidad y solidaridad. Algún borrón, pero natural dentro del contexto general.

Dani Martín (**)

Tres paradas que eran tres goles. En los dos que encajó estuvo vendido. Parece otro y el Málaga lo celebra.

Víctor Gómez (**)

A los cuatro minutos dejó solo a Febas para cocinar el 1-0. Carrilero o lateral, en su línea de siempre.

Peybernes (*)

Andaba muy bien, salvando situaciones de riesgo. En los goles debió hacer algo más.

Escassi (**)

En el eje de la zaga, en su primera parte achicó agua. Su mejor partido como central del curso.

Andrés Caro (*)

En el perfil zurdo estuvo menos cómodo y vio una amarilla necesaria. Eso le costó quedarse fuera al descanso.

Javi Jiménez (*)

Por su banda vino mucho peligro, es cierto, pero también sumó en ataque con centros peligrosos en la segunda mitad.

Genaro (*)

Bien en la contención aunque no siempre se puede salir bien parado de medirse al Valladolid.

Febas (**)

Asistió a Brandon en el 1-0 y volvió a multiplicarse. No mereció la amonestación.

Jozabed (**)

Kilómetros y clarividencia según el momento. Blando en el 2-1, anduvo cerca del 3-1 en la acción siguiente.

Vadillo (**)

Trabajó de lo lindo, marcó el 2-0 y en la segunda mitad, mientras le duró el combustible, hizo daño al rival.

Brandon Thomas (**)

En el gol solo había que estar y definir. Pero luego hubo un despliegue tremendo y con más sentido que otras veces.

Antoñín (*)

Nada más entrar, presionó a la zaga para forzar el error que llevó al 2-0.

Paulino (*)

Al servicio del equipo, se dejó ver por la izquierda y sacó el guante en algún centro.

Adrián (-)

Pudo ser el héroe pero desperdició varias ocasiones claras. Le falta ritmo, lógicamente.

Ramón (*)

Entró por Febas y se puso el mono de faena.