Cuando La Rosaleda ovacionó a Ibai Gómez: "Es la única vez que me pasó en mi carrera"

Tras marcar un golazo con el Alavés en 2018, el año del descenso a Segunda, la grada le aplaudió en un 0-3 con el equipo desahuciado

Respeto desde el Pirineo

Ibai Gómez celebra el gol por el que fue ovacionado. / Efe

Al frente del Andorra llega Ibai Gómez como entrenador a La Rosaleda. El vasco tiene una pinta prometedora en los banquillos. Con 35 años ya ascendió al Arenas de Getxo a Primera RFEF. Ello le valió la llamada del FC Andorra para saltar a LaLiga Hypermotion. Antes fue también seleccionador de la República Dominicana. En el Principado moldea a un equipo de autor, que juega muy bien al fútbol aunque lleva tres jornadas sin ganar.

En su comparecencia previa al partido de este domingo, Gómez recordaba una anécdota que le ocurrió en 2018 en La Rosaleda y que no ha olvidado. "Vamos a un estadio precioso, con un ambiente increíble. Además tengo un recuerdo muy bonito, porque como jugador es el único campo, siendo rival, en que salí aplaudido, siempre me voy a acordar de ello. La verdad es que es un estadio precioso", decía el bilbaíno.

¿Cuándo sucedió aquello? Fue en mayo de 2018, cuando Ibai jugaba en el Alavés. El Málaga, dirigido por José González, pasaba ese quinario que fue una segunda vuelta en la que el club se desangraba para dar con sus huesos en Segunda División. Ya con el equipo descendido matemáticamente, el Alavés ganó 0-3 en La Rosaleda en una matinal. El jugador que marcó la diferencia sobre el césped fue Ibai Gómez, que marcó el tercero y regaló el segundo a Demirovic con un pase espectacular. En ese tercer tanto, el ex del Athletic recibió un balón en el vértice del área, hizo un buen recorte y con su pierna 'mala', la izquierda, la puso en toda la escuadra de Andrés Prieto, que poco pudo hacer. Un golazo tremendo que despertó los aplausos de los pocos aficionados del Alavés y también de buena parte de La Rosaleda, que demostró señorío pese a que el cuadro vitoriano le estaba pintando la cara a su equipo.

El entonces jugador del Alavés quiso agradecer tras el encuentro la ovación de la afición blanquiazul tras el gol a pesar de lo mal que lo estaban pasando esa temporada: "Hoy quiero agradecer de forma especial a La Rosaleda, nunca me habían ovacionado así fuera de casa y viendo por la situación que estáis pasando aún lo agradezco más, si cabe. ¡Ánimo y espero que nos volvamos a ver muy pronto en Primera División!", decía con caballerosidad Ibai Gómez tras aquel episodio en redes sociales. Siete años más tarde regresa como entrenador del Andorra mostrando máximo respeto. No olvida aquel gesto.

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