Agentes de la Policía Nacional detectaron al conductor de un vehículo en las inmediaciones del aeropuerto de Málaga, llegando a bajarse y merodear entre los coches situados en las zonas de aparcamiento; lo siguieron hasta Marbella y allí le incautaron ocho catalizadores sustraídos y herramientas específicas para perpetrar los robos: una sierra eléctrica de batería, un gato hidráulico y ocho paquetes de hojas de sierra, por lo que quedó detenido. 

El arresto del investigado, un hombre de 46 años, se enmarca dentro de la operación Saw, llevada a cabo por agentes adscritos a la Comisaría de Distrito Oeste, en Málaga, que se inició a partir de un repunte en el número de denuncias relacionadas con la sustracción de catalizadores, unos dispositivos metálicos que forman parte del sistema de escape de los vehículos y cuya función pasa por variar químicamente los gases para reducir las emisiones contaminantes.

A partir de los casos denunciados, los agentes incrementaron la vigilancia en las zonas de aparcamientos más sensibles de sufrir este tipo de ilícitos penales, detectándose las maniobras sospechosas de un hombre de mediana edad, en un parking próximo al aeropuerto de Málaga, han informado desde Comisaría Provincial.

Según la investigación, el sospechoso, incluso se bajó de su automóvil y estuvo rondando los vehículos estacionados en las inmediaciones del aeródromo. Si bien, terminó abortando sus intenciones, por alguna circunstancia, para poner rumbo hacia el núcleo poblacional de Elviria, en Marbella, donde finalmente fue interceptado con apoyo de varias patrullas de Seguridad Ciudadana.

Los agentes incautaron en el interior de su vehículo ocho catalizadores sustraídos y herramientas específicas para el robo de las piezas: una sierra eléctrica de batería, un gato hidráulico y ocho paquetes de hojas de sierra, por lo que quedó detenido y puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Marbella.

Desde la Policía Nacional, indican que el modus operandi utilizado por las organizaciones dedicadas al robo de catalizadores consiste en seleccionar el coche objetivo, elevarlo con un gato hidráulico y, acto seguido, realizarle unos cortes en los bajos con una sierra eléctrica o manual, extrayendo la pieza. Lo valioso de los catalizadores son los metales que albergan -paladio, rodio y platino-, muy cotizados en el mercado negro.