Si alguna vez has tenido la oportunidad de ver un hipopótamo en persona, probablemente lo hayas visto descansando, bostezando, o nadando tranquilamente por el agua. Estos majestuosos y gigantes animales viven en las regiones acuáticas de África y hoy, en Mascotíssimas, vamos a explorar más allá sobre sus características, puesto que a pesar de tener un aspecto dulce también son considerados como uno de los animales más peligrosos del reino animal. 

La palabra hipopótamo proviene del griego y significa "caballo de río" y son mamíferos herbívoros de gran tamaño. Pueden llegar a medir hasta 4 metros de largo y pesar alrededor de 1.500 kilogramos, lo que los convierte en los segundos mamíferos terrestres más grandes del mundo, solo superados por los elefantes. Su piel es gruesa y casi sin pelo, de color gris oscuro, lo que les proporciona una protección contra el sol y ayuda a mantener su piel hidratada en los largos periodos que pasan en el agua.

Los hipopótamos se encuentran principalmente en las regiones de agua dulce de África subsahariana y prefieren estar en lugares donde puedan sumergirse y mantenerse frescos durante el día, como por ejemplo los ríos, lagos o estanques.

Como curiosidad, la reproducción de los hipopótamos ocurre en el agua. Después de un período de gestación de aproximadamente 8 meses, la hembra da a luz a una sola cría. Los terneros son bastante grandes al nacer, pesando alrededor de 45 kilogramos. Son cuidados y protegidos tanto por la madre como por otros miembros de la manada. La madre amamanta a su cría bajo el agua y el ternero comienza a consumir hierba a los pocos días de su nacimiento.

¿Por qué son considerados peligrosos?

Pero, a pesar de aparantar ser tranquilos puesto que también son animales herbívoros y se alimentan principalmente de hierba, lo cierto es que son animales agresivos y peligrosos que pueden llegar a representar una amenaza para los seres humanos y otros animales.

A pesar de su apariencia tranquila y lenta, son conocidos por su comportamiento agresivo y territorial. Son capaces de causar daño grave e incluso la muerte. Cuando se sienten amenazados o perciben una invasión en su territorio, los hipopótamos pueden atacar con gran ferocidad. Su principal arma defensiva son sus mandíbulas poderosas, que cuentan con colmillos grandes y afilados. Estos colmillos pueden causar heridas graves y potencialmente mortales. De hecho, se estima que los hipopótamos son responsables de más muertes humanas en África que cualquier otro animal salvaje.

Es importante destacar que los ataques de hipopótamos generalmente ocurren cuando se sienten acorralados, asustados o cuando intentan proteger a sus crías. También pueden ser particularmente agresivos durante la temporada de apareamiento. Es fundamental mantener una distancia segura y evitar interferir con ellos en su hábitat natural.

Además de representar una amenaza directa para los humanos, los hipopótamos también pueden dañar los cultivos y la infraestructura en áreas cercanas a los cuerpos de agua donde habitan.