El archipiélago de Galápagos en Ecuador es considerado por la UNESCO como uno de los lugares de la Tierra que forman parte del patrimonio de la humanidad por su importancia como hogar de multitud de especies animales y vegetales tanto en las islas como en sus aguas.

Sin embargo, es también un espacio cuyo bienestar puede peligrar dado el creciente impacto del cambio climático y la actuación humana a través de la pesca intensiva o el transporte masivo, motivos por el cual organizaciones como Greenpeace se movilizan para lograr una mayor protección de la zona.

Lo que pide Greenpeace

En una entrada al blog de la ONG publicada en marzo, Greenpeace habla de la importancia de estas islas y concretamente de su protección oceánica, que consideran como uno de los mejores ejemplos. Esta área marina fue creada por el Gobierno ecuatoriano en 1998 y ocupa unos 133.000 kilómetros cuadrados.

Sin embargo, el resto de las áreas cercanas no tienen tanta suerte. Desde Greenpeace señalan la situación de desprotección que existe fuera de la zona que se encuentra dentro de los límites establecidos gubernamentalmente a día de hoy. 

Concretamente la preocupación se fija en el área en la que confluyen las aguas internacionales de Ecuador, Costa Rica y Panamá, en la que trabajan buques de pesca industrial, que "devastan la preciosa vida marina, a menudo en peligro de extinción". Ya que esta zona es usada por muchas especies en sus trayectos migratorios, la ONG llama a protegerla de forma urgente, animando a los gobiernos a impedir la pesca industrial, maximizando las medidas que ya han llevado a cabo estos.

Además, Greenpeace realizará estudios para defender su postura ante las autoridades, lo que incluirá también pruebas de ADNe. Recuerdan también a los países implicados que el pasado 2023 se aprobó el Tratado Global de los Océanos, al que los gobiernos pueden adherirse para crear zonas protegidas en alta mar. 

También para mejorar la protección del archipiélago, Ecuador ha duplicado la tasa turística que se debe pagar para acceder a las islas, que desde este año se encuentra en los 100 dólares. Hay excepciones para este nuevo precio, ya que los turistas de países que formen parte de Mercosur solo pagarán tan solo los 50 dólares que se cobraban por acceder hasta el año pasado. 

El Ministro de Turismo de Ecuador, Niels Olsen, declaró que el dinero extra que se recaudara con esta medida se destinará a los esfuerzos de conservación de estas islas que reciben unos 170.000 turistas al año.