Tal como ha explicado el Defensor del Pueblo, Francisco Fernández Marugán, durante el estado de alarma, tras el cierre de las estaciones de ITV, la Administración estableció una prórroga para la validez de los certificados y una vez restablecido el servicio, determinó que el plazo de validez de las inspecciones se le descontaría el periodo de prórroga. Tienes más información al respecto aquí.

"La institución ha recibido quejas de asociaciones y particulares en las que ponen de manifiesto su disconformidad con estas condiciones, ya que con ellas muchos vehículos tienen que realizar dos inspecciones seguridad en un corto periodo de tiempo con los costes y cargas que supone para sus propietarios", ha lamentado el Defensor del Pueblo.

Desde la Secretaría General de Industria aseguran que no imponen cargas adicionales a los interesados ya que se va a efectuar una inspección que debió realizarse y quedó en suspenso pero sin eliminar la obligación de su ejecución.

Sin embargo, Fernández Marugán recuerda que el objetivo general de la ITV es asegurar que los vehículos estén en buenas condiciones de uso desde el punto de vista de seguridad y medio ambiente y no observa en la respuesta de la Administración razones imperiosas de interés general que justifiquen el recorte de la vida legal de las ITV.

Por ese motivo, no comparte la afirmación de Industria ya que, en su opinión, al descontar el periodo de prórroga está "acortando de manera artificial la duración de las ITV".

Todo ello después de que el Tribunal Supremo haya admitido a trámite el recurso interpuesto por la organización de defensa de los conductores Automovilistas Europeos Asociados (AEA) contra la Orden del Ministerio de Sanidad que con motivo del Covid-19 redujo los plazos en los que los automovilistas tienen que pasar las sucesivas inspecciones técnicas de sus vehículos (ITV). 

ITV motocicletas

Por otro lado, un 43% de las motocicletas y un 58% de los ciclomotores no pasa la inspección técnica de vehículos reglamentaria, según datos de AEMA-ITV, que alerta del gran absentismo que existe en este aspecto a pesar de que en 2019 las muertes de motoristas alcanzasen su máximo de la última década, con un total de 264 fallecidos.

"A nadie le gustaría encontrarse con ese alto porcentaje de motos que circula sin saber si tiene bien las ruedas, los frenos o las luces a punto", ha indicado el presidente de AEMA-ITV, Jorge Soriano.

Según cifras del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, solo en la Comunidad de Madrid el 20,96% del total de motos y ciclomotores fue rechazado con algún defecto grave a la hora de pasar la inspección.

El alumbrado y la señalización fueron los defectos graves más recurrentes, con un 33,8% de los casos, seguido del acondicionamiento exterior, la carrocería y el chasis (18,84%), las emisiones contaminantes (17,65%) y los ejes, las ruedas, los neumáticos y la suspensión (7,96%).