Daniel Luque y Rafaelillo a hombros en Murcia

El sevillano Daniel Luque cuajó una extraordinaria tarde en el coso de La Condomina de Murcia, dando una gran dimensión y paseando tres orejas y un rabo de una manejable corrida de José Luis Pereda, compartiendo puerta grande junto a Rafaelillo.

Lo más macizo de la tarde lo realizó al quinto toro, un extraordinario animal con muchísima clase y repetidor, al que cuajó de principio a fin, lidiando siempre muy bien y cuajando soberbias tandas de temple, poderío y mano baja. Luque conquistó así Murcia, dejando patente que es un joven valor en alza.

El segundo fue otro toro noble, aunque con el celo justo, y con él se gustó el torero de Gerena, en una labor con mucho temple y ligazón, en series con mucha clase. Luque remató de una buena estocada, por lo que paseó una oreja del noble ejemplar de Pereda.

Por su parte, Rafaelillo destacó en su primero, con un buen toro de Pereda con el que se gustó en series templadas y ligadas por ambas manos, dándole tiempo y sitio. El toro tuvo clase pero le falto algo de transmisión, que suplió Rafaelillo con sus ganas. El murciano remató de una buena estocada tras un pinchazo, abriendo el marcador de la corrida.

El cuarto no fue un animal fácil, pero Rafaelillo lo supo meter en la muleta a base de oficio, disposición, esfuerzo y entrega, siendo recompensado con los dos trofeos.

No terminó de acoplarse Julio Benítez con el tercero, otro ejemplar en la línea de sus hermanos, con el que al cordobés le costó más ligar y mantener la intensidad de la faena. Hubo algunos muletazos buenos, pero a la faena le faltó intensidad. A Julio Benítez, que reaparecía tras un mes en dique seco, no se le apreciaron a primera vista secuelas de su lesión en el hombro mientras que tampoco terminó de verlo claro con el que cerró plaza.