Diego 'El Cigala' concluye mañana en Estepona su gira por España

El cantaor flamenco Diego El Cigala cierra mañana en la plaza de toros de Estepona la gira de conciertos que ha ofrecido este año en España. La actuación comenzará a las 22:00 de una noche veraniega propicia para "cantar tangos, lágrimas y cerrar con una guitarra tocando flamenco", señaló ayer el artista, vecino de Benalmádena desde hace cuatro años. El artista repasará sus temas más conocidos, en los que cantará flamenco, tango, copla, boleros o diversos ritmos afrocaribeños. Una de las sorpresas de la noche será la participación de Diego García, guitarrista del músico argentino Andrés Calamaro, que colabora en el próximo trabajo del cantaor madrileño, que ya está "cerrado" y del que adelantó que contendrá temas "muy buscados", entre los que destacarán los tangos "muy profundos" que servirán para rendir un tributo a Mercedes La Negra Sosa, una de las grandes voces del folclore argentino. Será un disco de estudio, no en directo, de los que "ahora te gustan una cosa y mañana, cuando te levantas, piensas que no vale".

Como teloneros de El Cigala actuarán la cantaora Ana Fargas, el percusionista Chico Fargas y el guitarrista Paco Javier Jimeno, galardonado con distintos premios nacionales y que ha acompañado a grandes artistas como Camarón de la Isla o José Mercé.

En la actuación, el artista presentará algunas de las obras que recitará en Sintiendo América, una gira de 30 conciertos por el norte y el sur de aquel continente que El Cigala comienza el uno de septiembre. Ahí se encontrará con un público "maravilloso, que parece que está ahí de toda la vida". En México se produce parte de la próxima entrega de El Cigala, con lo que el cantaor permanecerá en aquel país algunas semanas. El último concierto en tierras americanas será el 20 de noviembre en el Town Hall de Nueva York.

Fueron los grandes genios del flamenco, como Manolo Caracol o Manuel Vallejo, los que, según el cantaor, elevaron la disciplina a la categoría de patrimonio cultural de la Humanidad. La certificación que hizo la Unesco en 2010 sirvió para que el flamenco, "una música que tiene un sexto sentido", dejara ser una "afición para un público minoritario". "Donde llega, pega", sintetizó ayer El Cigala. Uno de los países en lo que más afición existe por el flamenco es Estados Unidos. "En la gira de Morao, el público le gritaba 'ole, Morao'. Yo no daba crédito". Los organizadores del concierto aseguran que gran parte de las entradas se han vendido a extranjeros. Del flamenco destacó también su rítmica, que, a diferencia de otras músicas, le permite adaptarse a otros estilos.

De la opinión de los "flamencólogos, flamencólicos y puristas", el artista aseguró sentirse indiferente. "Con decirle 'suba usted y hágalo', asunto solucionado". De su trabajo Lágrimas negras, que protagonizó con el músico de jazz cubano Bebo Valdés, señaló que hubo críticos que le dijeron "estáis majaras". "Con conocer a Bebo esto está más que pagado", les respondió.