El maestro de Chiva firmó ayer un triunfo rotundo en su segunda tarde del ciclo ferial. Llegó con muchas ganas tras no poder abrir la Puerta Grande de Manolo Segura en su primera comparecencia, el viernes, y salió cual novillero a fajarse sobre el albero. Tiene más mérito al tratarse de una figura del toreo, que no tiene nada que demostrar y casi todo ganado. Finalmente se marchó triunfador y a hombros de La Malagueta. Segunda Puerta Grande tras la firmada por José Tomás. Sin embargo, Ponce en ninguna de sus dos actuaciones ha podido colgar este año el cartel de no hay billetes. Sí se registraron dos casi llenos, pero el papel no se agotó de la taquilla. Igualmente, todavía quedan entrada para el festejo de esta tarde, la última del ciclo ferial, que cuenta con numerosos alicientes. Entre ellos la despedida de Luis Francisco Esplá, un veterano espada con más de tres década de alternativa. Javier Conde y Cayetano, que completan la terna, buscarán el triunfo en su segunda tarde. Que Dios reparta suerte en esta última tarde.