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"Llegar al fondo y tocar suelo también sirve para impulsarte"

  • El diestro malagueño se anuncia el próximo día 21 en la que será su primera corrida picassiana "Creo que el tiempo ha sido justo conmigo"

Durante la conversación cada palabra se convierte en un mensaje positivo y de motivación en su carrera. Después de 11 años desde que se doctorara como matador de toros, Salvador Vega (Málaga, 1984) vuelve un año más a anunciarse en su Feria de Málaga. Una cita que siempre va marcada en rojo en el calendario y en el corazón de este torero que aún conserva sus ilusiones intactas. Atrás quedaron otros compromisos como los de Francia, Archidona o Tudela, de donde se ha llevado triunfos y grandes sensaciones. Antes de que llegue el próximo día 21, le espera Marbella junto a Finito de Córdoba y David Galán para lidiar toros de la ganadería de Buenavista.

-Más de diez años de alternativa y de nuevo presente en la Feria de Málaga.

-Realmente echo la vista atrás y son 11 años en Málaga, incluso ha habido años en los que he estado dos tardes. Es una trayectoria bonita unida a Málaga. Me siento muy orgulloso de que sea así y a la vez voy a intentar que dure este idilio el mayor tiempo posible.

-Habla de "idilio". Se entiende que se siente querido por la afición de Málaga.

-Sí, me siento muy querido por Málaga. En 11 años ha habido tardes de todo. Mejores y peores. Y cuando ha sido así me han exigido, pero esa misma exigencia nace de que, a pesar de los años, siguen creyendo en mí.

-¿Qué Salvador Vega se van encontrar en Málaga?

-El mismo que llega todos los años; con la ilusión a tope y con mucha responsabilidad. Málaga es esencial, es la Feria que representa mi carrera y quiero reivindicarme. Málaga es la cita anual que hace que toda esta lucha siga teniendo sentido.

-Será su primera picassiana y además con un cartel de toreros locales de tres épocas distintas.

-Me hace una ilusión tremenda. Hace dos años se levantó cierta polémica porque fue un cartel de malagueños, precisamente con los mismos que me anuncio ahora, y yo no estaba, y en cierto modo creo que el tiempo ha sido justo conmigo. Me siento muy recompensado.

-Su intención era volver al circuito de las grandes ferias, y a excepción de Málaga, se siguen resistiendo...

-Intento tomármelo con filosofía por eso intento en cada tarde, sea donde sea, exponer mi criterio y y el mayor nivel posible. Eso me hace seguir luchando porque mi compromiso es con el toreo y conmigo mismo.

-Son tiempos difíciles para los toreros que están en su situación. ¿Nunca ha pensado en tirar la toalla?

-La fe y las ilusiones flaquean y empiezas a pensar y plantearte este tipo de cosas, pero llegar al suelo y tocar fondo también te sirve para impulsarte. Cuando la ilusión y el compromiso flaqueen dejaré de vestirme de luces. Ahora mismo siento una alegría tremenda ejerciendo mi profesión y aprovecho las mínimas opciones que tengo.

-¿Qué planes contempla para el resto de la temporada?

-No me planteo nada. Tenía ocho corridas de toros hechas y la última resulta que es Málaga. Después no tengo fechas. Como cierre intentaré salir muy contento el 21 de agosto para que sea un cierre bonito. Luego, a disfrutar de la familia y de mi niña.

-¿Ser padre de familia le ha hecho cambiar los planes de su carrera?

-No, ser padre me ha dado una ilusión tremenda. Todas las sensaciones positivas te ayudan a es expresarlo todo mejor. Tener a mi hija ha sido un desborde de pasión y de sentimientos puros que también se transmiten toreando.

-Hace escasos meses cambió de apoderados. ¿Cómo funciona esa nueva unión?

-Vamos caminando más allá de las dificultades de la temporada. Me han puesto en todas las plazas que han podido. Es cierto que cuando nos unimos se crearon unas expectativas mayores de las que salieron, ya que se habló de Madrid y Sevilla y no salieron, pero es cierto que ahora cuesta un mundo cerrar una fecha. Hay que tener paciencia. Si no estoy este año estaré el que viene.

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