La Casa de Museo de Mijas acoge hasta el próximo 9 de marzo la exposición de cuadros en homenaje a la pintora americana Luella Ramsay (1926-2008), donde los visitantes se convierten en testigos de las distintas etapas de su vida mediante pinturas que recogen todo tipo de escenas: retratos, paisajes y figuras al desnudo realizadas en acrílico, óleo, acuarela y rotulador. En cuanto a los retratos, Luella solía dibujar a las personas de su entorno, como parejas sentimentales o amigos de la juventud, donde sobresale un cuadro de Janet Mendel, quien se ha encargado de sacar a la luz las obras de la artista. Pero si algo destaca en este estilo, además de los autorretratos, son aquellas pinturas en las que se ve abrazada a su hermana gemela, como es el caso del cuadro que lleva el nombre de ambas, Luella and Louise. En el caso de los paisajes, uno de los cuadros más conocidos es aquel que representa la Iglesia Parroquial de Mijas Pueblo (Mijas Church) cuando aún no se habían construido las edificaciones de alrededor. También está Mijas Sunset, una puesta de sol en la que predominan los trazos rojizos y anaranjados. Por otra parte, llaman la atención las pinturas de desnudos, sobre todo por los colores más naturales. Con respecto a las figuras, llenas de sensualidad, éstas destacan por sus exuberantes volúmenes. Front y Back, como bien indican los nombres, son dos cuadros que representan los torsos femeninos desde la parte frontal y trasera, con la peculiaridad de que carecen de piernas y cabeza. Según cuenta su amiga Janet, estas pinturas son una especie de "guiño" hacia un amigo, el cual solía esculpir los cuerpos de esta manera.

Luella Ramsay estudió en la Escuela de Arte de Corcoran, en Washington Districto Federal entre 1946 y 1949, donde ganó varias veces el premio a las Mejores Obras del Año. Mientras recorría diferentes lugares del mundo, como México, Alemania y más tarde, Suiza, país en el que ejerció de profesora de arte en las bases militares de Europa, Luella solía veranear en Mijas. Tanto le gustó el municipio que decidió mudarse "para siempre" en 1972, año en el que se abrieron las puertas del Centro de Artes de Mijas. Ahí Luella enseñaba dibujo, pintura, historia del arte y cerámica tanto para adultos como para menores, de los cuales algunos han seguido los pasos de las Bellas Artes. "Era muy querida en el pueblo", cuenta Janet acerca de su amiga, quien a través de diversos talleres celebrados en el municipio mijeño consiguió sacar el talento de las personas.

Luella vivía en el famoso Barrio de Santa Ana y siempre estaba rodeada de amistades. De hecho, a menudo las tomaba como inspiración, pidiéndoles que le explicaran qué serían si fueran un dibujo para luego ponerse manos a la obra. Resultado de este "juego" es el cuadro Reaching out, inspirada en un emigrante de color que se imaginaba así mismo extendiendo las manos para ayudar y ser ayudado. No es de extrañar que de ella digan era muy intuitiva, así como tímida y poco habladora, aunque todos coinciden en que transmitía mucha energía.

También hacía pequeñas esculturas, como la de una mujer sentada, que también se ha rescatado para la exposición. En este sentido, algunas de las obras pertenecen a colecciones privadas, como Father, Shirtless Man o Wave. Ésta última representa una ola gigante a punto de romperse en la orilla, para lo cual la artista escogió colores turquesas y azules muy fuertes.

El último cuadro que pintó en vida, además una variedad de dibujos a lápiz, se denomina Sheila y es un retrato de una amiga suya. Caracterizado por un contraste de colores cálidos y fríos, Luella se despidió del arte con pequeños trazos, ya que los temblores de su enfermedad no le dejaban pintar como a ella le hubiese gustado.

La entrada a la exposición es gratuita y el horario es de 10:00 a 14:00 y de 16:00 a 19:30. El 15% de los beneficios se destinarán a Cudeca.