El actor y director Paco León aseguró ayer que con su segunda película, Carmina y amén, que estrenará en el Festival de Málaga, no ha perdido la vocación experimental y continúa buscando fórmulas para hacerla "más accesible al público". "Está en la voluntad y el ADN del 'carminismo' hacer las cosas de otra manera y buscar nuevas formas de hacer la película más accesible al público", aseguró el cineasta sevillano en Madrid, después de la tradicional presentación de la programación oficial del festival en la capital de España.

A diferencia de Carmina o revienta, que tuvo un estreno simultáneo en cines y en plataformas de internet, la segunda entrega de las aventuras de Carmina Barrios se estrenará primero sólo en cines, el 30 de abril, tras un acuerdo con la distribuidora A Contracorriente Films y con los exhibidores. No obstante, León asegura que sigue negociando para encontrar un "modelo mixto", ya que, en su opinión, cada película tendría que encontrar su modelo de distribución. "No puede valer una única fórmula para El Hobbit y para Carmina. Ahora que hay muchas opciones, hay que combinarlas según el presupuesto de la película, la capacidad de promoción que tenga o el nicho de público, en lugar de ir todos por el mismo carril, donde los americanos nos pasan por encima y nos pisotean", añadió.

En este sentido, se manifestó optimista al considerar que la industria "está empezando a adaptarse" a los nuevos modelos de consumo. "Yo prefiero ver la botella medio llena. Igual que para mí es digno de celebrarse el experimento de que se pudiera hacer un estreno simultáneo con Carmina o revienta, creo que este otro modelo que estamos buscando también significa eso. Las estructuras son suficientemente flexibles como para asumir otras cosas", valoró. En la producción, esta vez León ha contado con el apoyo de Telecinco Cinema y Canal Plus, que, según dice, le han dejado hacer lo que le ha dado la gana.

Aunque ya no cierra la puerta a seguir su carrera como director, insiste en que nunca fue algo que se propusiera. "Pero, si se te mete una historia dentro, tienes que contarla y, como la experiencia anterior fue tan positiva y enriquecedora en todos los sentidos, ¿por qué no repetir?". Eso sí, sin abandonar la actuación. "Me lo paso bastante bien. He conectado con cosas con las que ya trabajaba como actor, esa búsqueda de la realidad y de lo auténtico, y ahora también veo que puedo hacerlo desde la dirección", apunta. "Pero en cualquier caso mezclaría. No voy a dejar de actuar, porque soy básicamente un cómico que ahora dirige", concluye.