El Consejo de Ministros nombró ayer a Adriana Moscoso, directora general de Industrias Culturales; a Olvido García Valdés, directora general del Libro y Fomento de la Lectura; y al arquitecto malagueño Román Fernández-Baca Casares, director general de Bellas Artes.

Al nombramiento de Amaya de Miguel como nueva directora general del Inaem, adelantado el jueves por el ministro de Cultura, José Guirao, ayer se sumaron estos nuevos nombramientos, según informaron desde el Ministerio de Cultura y Deporte al término de la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.

La poeta Olvido García Valdés se hace cargo de la dirección general del Libro

La poeta y ensayista asturiana Olvido García Valdés (Santianes de Pravia, 1950), una de las referencias más respetadas e influyentes de la poesía española contemporánea, es catedrática de Lengua Castellana y Literatura y ha sido también directora del Instituto Cervantes de Toulouse (Francia). La escritora cuenta con el Premio Nacional de Poesía 2007 por su libro Y todos estábamos vivos (Tusquets Editores, Barcelona, 2006).

Por su parte, Adriana Moscoso del Prado Hernández (Pamplona, 1972), nombrada ahora nueva directora general de Industrias Culturales, ha sido, desde febrero de 2017 hasta la actualidad, directora de Asuntos Jurídicos y Públicos de la Confederación Internacional de Sociedades de Autores y Compositores (Cisac). Previamente, según recordaban desde el Ministerio de Cultura, ha sido secretaria General del Instituto de Derecho de Autor, directora de la Asesoría Jurídica de la Sociedad Estatal para la Acción Cultural Exterior (Seacex) y asesora jurídica de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE).

Por último, la dirección general de Bellas Artes estará a cargo de Román Fernández-Baca Casares, arquitecto malagueño (1951) especializado en Urbanismo que ha sido hasta la actualidad director del Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía. Bajo su dirección, el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico ha obtenido numerosos premios como el Premio Nacional de Restauración y Conservación de Bienes Culturales (2006) o la Medalla de Oro de la Asociación Española de Amigos de los Castillos (2007).