La actriz Victoria Vera lamentó ayer en Málaga que el teatro sea en España "la hermanita pobre de la cultura", porque "cuando hay presupuestos, el 70% se lo llevan la música y la lírica, y lo poco que queda se reparte entre la danza y el teatro". Por ello, en España "no hay un ballet estable clásico y el teatro malvive cargado de subvenciones que se reparten en pequeñas dosis a muchísima gente, y compitiendo con unos extraordinarios montajes enormemente caros, sin coto de presupuesto", dijo Vera, quien ofreció en el Centro Cultural Provincial una lectura dramatizada de la obra de Javier Tomeo Los misterios de la ópera.

La actriz, que recordó la celebración del Día Mundial del Teatro, citó el ejemplo del Covent Garden británico, donde cualquier montaje "no puede superar un tope de 700.000 libras", mientras que en España "cuando un creador llega a un teatro nacional, puede hacer lo que quiera, y eso impide que haya una empresa privada que pueda competir". Esta situación le ha llevado a promover una ley de mecenazgo "que permita abrir el mercado teatral y que los artistas que quieran montar espectáculos puedan acudir a inversores que desgraven fiscalmente". De esta forma se conseguiría "abrir el espectro y que no sólo haya teatro subvencionado, experimental o independiente, que tiene que haberlo para una serie de cosas, pero también un mercado abierto para la gente que no quiere llamar a las puertas de los políticos", añadió. Sobre el hecho de que se haya prodigado más en el teatro que en el cine en los últimos años, afirmó que se trata de "etapas" en su carrera, aunque "los personajes teatrales son muy enriquecedores para una actriz".