"Aún no tenemos contemplado un ERE para Siniestro Total"
La legendaria banda de rock regresa hoy a Málaga, esta vez a la Sala París 15 con un concierto en el que presentará su nuevo disco "y la artillería pesada de toda la vida"
Dice Julián Hernández que para juntar Galicia y Málaga hay que "doblar mucho el mapa español". Un avión hace milagros, así que esta noche estará junto a su banda de toda la vida, Siniestro Total, en la Sala París 15 dentro del ciclo Wild Weekend.
-¿Había ganas de volver a Málaga?
-Sí, Málaga es un sitio muy divertido. Tengo muchos amigos ahí, (léase Pepe Trueno y demás). Lo de tocar en Málaga lo tenemos como un icono. Siempre recordaremos el concierto en la plaza de toros junto a Danza Invisible y Radio Futura. La plaza estaba a tope y nuestro concierto empezaba con el tema de Miami Vice con todas las luces apagadas. Justo ahí apareció un helicóptero de la Policía con un foco gigante iluminando de un lado a otro. La poli nos hizo un favor enorme, aquello fue espectacular. Ni U2 es capaz de eso…
-¿Lo de hoy será igual?
-Está planteado como un concierto para sala. Hemos copiado una idea a Barricada y lo hemos dividido en dos partes. Una, con casi todo el disco nuevo, y otra, que servirá para sacar la artillería pesada de toda la vida, los cantes regionales. Algo así como todo lo que siempre quisiste escuchar y siempre has escuchado. Siempre nos dicen que falta alguna, pero no se pueden hacer cuatro horas de concierto.
-¿Siguen con las mismas ganas de siempre tras 30 años?
-Tenemos ganas de que siga así. En el grupo ha habido cambios de gente a lo largo de los años, acabaron los maravillosos 80. Si estuviéramos con menos ganas no estaríamos. Sería muy difícil comunicar algo en lo que no creyésemos. Eso lo hacen los políticos y les sale bien, pero a nosotros no.
-¿Y cómo está la música hoy?
-España es un país bastante cutre musicalmente hablando. Estamos en un punto muy cercano a las catacumbas de las que salimos una vez y a las que no deberíamos volver nunca. En general, la escena del rock es para unas minorías, pero son importantes. Lo mayoritario es ponerle el nombre de Bisbal a un avión, pero en fin, eso nunca nos afectó. Cuando empezamos estaban Los Pecos y también nos daba igual.
-Canciones como 'Cuanta puta y yo que viejo', ¿se pueden escribir hoy día?
-La frase es de un amigo de mi padre, que estaba muy mayor y decía eso. Pero eso lo dice la canción, no nosotros. Es como si le echaran la bronca a Aviador Dro por hacer Nuclear sí, en la que decían Yo quiero bañarme en mares de radio, con nubes de estroncio cobalto y plutonio.
-Y usted, ¿Es 'pro' nuclear o 'anti'?
-De entrada, la energía es más limpia que una térmica que se mueve por gasoil. Pero han dejado que las centrales se queden obsoletas. Se debía trabajar más en la fusión nuclear que no genera residuos que duran miles de años…
-¿Culpa de los políticos?
-Da la sensación de que hoy los más competentes se apartan de la primera línea, porque la norma parece ser la incompetencia y la estupidez. Sólo la imagen del Parlamento, donde nadie sale a hablar sin papeles escritos da visión de la pobreza del discurso político actual. Es un problema de todo occidente, de democracia que dan risa.
-Pues han decidido atacar Libia entre casi todos...
-Es que yo creo que les gusta mucho esto de la guerra, les pone mucho, es muy sexy… En Libia hay una guerra civil con un tipo tan pintoresco como Gadafi. Hay un baño de sangre, pero de ahí a pacificar a bombazos, hay un trecho muy largo. Y cuando uno lee la descoordinación de esos que se llaman aliados, todo empeora. Da la sensación de que EEUU, Francia y Gran Bretaña, tienen poca confianza en España. Las únicas referencias que habrá del Ejército español en Wikileaks son las Historias de la Puta Mili o cosas así.
¿Tendrá su propio expediente de regulación Siniestro Total?
-Hombre, si conseguimos hacer un ERE en el que podamos choricear algo de dinero… pues venga; aunque por ahora no lo tenemos contemplado. Siempre hemos vivido con una espada de Damocles cerca, con la idea de que cada disco es el último porque va a ser un desastre. Pero al final seguimos adelante. Cuando empecemos a hacer chanchullos y no nos pillen, igual lo dejamos.
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