Cultura

El enigma Greco

  • Una talla del siglo XVI que diversas fuentes atribuyen a Doménikos Theotokópoulos se conserva en el Museo de los Colarte de Antequera · La Diputación impulsará una investigación para dilucidar su autoría

Los visitantes del Museo de los Colarte de Antequera pueden admirar la hermosa talla de un Cristo crucificado realizada en madera policromada y fechada en el siglo XVI. La escultura, con una altura total en su conjunto escultórico de 95 centímetros, pertenece a la Diputación provincial de Málaga y durante muchos años estuvo conservada en una urna de madera entre los fondos de la institución, hasta que se decidió su exposición en el citado museo. Se trata de una imagen conmovedora, con el Cristo agonizante en una gestualidad dramática que responde plenamente al ideal estilístico renacentista del cuerpo humano. La popularización iconográfica de este tipo de Cristo en plena expiración se debe, de hecho, al mismísimo Miguel Ángel, que desde Florencia fijó el canon al respecto con el dibujo para el Crucificijo de Vittoria Colonna, realizado en 1540 y conservado actualmente en el British Museum de Londres. Pero la figura custodiada en Antequera encierra un enigma que trasciende el de su misma belleza: el que apunta a que su autoría corresponde a Doménikos Theotokópoulos El Greco (Heraclion, Creta, 1541-Toledo, 1614), una sospecha que ha envuelto a la talla durante el último medio siglo y que ha suscitado no pocas polémicas. Ahora, la Diputación provincial de Málaga está dispuesta a confirmar esta historia y para ello pondrá en marcha una nueva investigación con técnicos punteros y expertos en patrimonio artístico.

La mano del Greco se extiende desde diversos flancos. Según los archivos de Patrimonio Histórico de la Diputación, el Cristo pasó a formar parte de sus fondos en 1975 a raíz de una donación efectuada por los hermanos María Isabel y José Antonio Pons de Luna. La talla había pertenecido a su padre, Antonio Pons Ramírez de Verger, quien en 1964 estableció el depósito de la pieza a favor de la Casa del Greco, en Toledo, donde permaneció hasta su fallecimiento. Entonces, la institución castellana devolvió la escultura a los herederos legítimos, y posteriormente éstos la donaron a la Diputación. Esta familia, que se contaba entre los descendientes del Greco, defendió siempre la autoría del artista, y lo cierto es que la hipótesis contó con informes muy importantes a favor desde instituciones como el Museo del Prado y el Museo de Bellas Artes de Málaga. Pero el asunto es delicado y toca andar con pies de plomo. Historiadores del rigor de José María de Azcárate han preferido no pronunciarse taxativamente sobre la cuestión al valorar las premisas que apuntan tanto a favor como en contra. Cualquier posible investigación al respecto parte, inevitablemente, de una posición difícil dada la muy limitada producción escultórica del Greco, quien desde su juventud prefirió volcar en la pintura todo el genio que le encumbró como una de las referencias decisivas del arte de toda la civilización occidental. En el fondo, más allá de su delicada filiación manierista, los elementos del Cristo que apuntan a la paternidad del Greco son escasos. Corresponde ahora a los especialistas la posibilidad de un dictamen definitivo.

La diputada provincial de Cultura, Marina Bravo, comparte la predisposición a la prudencia a la hora de sacar a relucir el nombre del Greco. "Es cierto que hay informes con una resolución positiva, pero otras instituciones como la Academia de Bellas Artes de San Fernando afirman que, si bien no se puede negar radicalmente la autoría del Greco, tampoco se cuenta con indicios suficientes para admitirla", explica. Así que el trabajo por hacer al respecto es mucho y no todos los vientos soplan en la misma dirección. Bravo señala igualmente que la verdadera intención de la Diputación es "poner la talla en valor, darla a conocer, recuperarla para los malagueños. Durante muchos años ha estado olvidada, no se le ha prestado la atención merecida, y de hecho el Museo de los Colarte de Antequera, donde las visitas son necesariamente restringidas, no es el espacio idóneo para su exposición. Nuestro deseo es que la obra pueda verse en el futuro Museo Provincial, en las condiciones óptimas. La investigación sobre la autoría del Greco se enmarca, de hecho, en el proyecto conjunto de puesta en valor". Este rescate, según la diputada, no precisará de reformas ni intervenciones en la talla "porque su estado de conservación es excelente, a no ser que los técnicos que van a trabajar con ella lleguen a una conclusión distinta".

El informe de Patrimonio Histórico de la Diputación describe la talla de este modo: "Su estilizada anatomía, de torso prolongado y extremidades delgadas y alargadas, constituye un inmejorable soporte estructural a la posición forzada del cuerpo, con el tórax algo levantado por el esfuerzo de la exclamación, la pierna derecha flexionada y montada sobre la izquierda completamente estirada, las tensiones musculares del vientre y región inguinal y el violento escorzo de la cabeza coronada de espinas". Si la titularidad del Greco se confirma, Málaga contará con otro decidido atractivo histórico entre sus tesoros; pero, de cualquier forma, el Renacimiento tiene en la provincia uno de sus mejores aliados en la anatomía de este Cristo ideal y humano, hermoso y enigmático.

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