El feminismo se reivindica con las Amazonas

Los tambores tribales sonaron al unísono cuando de repente las amazonas comenzaron a alzar su grito de guerra. El último montaje del Festival de Teatros Romanos de Andalucía es una reivindicación del papel de la mujer en el que las amazonas reflejaron el dolor físico del cuerpo femenino, a gritos de un parto doloroso, y el achaque que sufren ante una sociedad machista.

La coreografía, marcada por una fusión de danza y flamenco, narró la historia de una de las guerreras, interpretado por la coreógrafa y bailarina principal, Rosario Toledo. Esta luchadora da a luz a un hijo varón, lo que desata la furia de las amazonas. A raíz de este suceso, la tribu narra el sufrimiento de las mujeres en un mundo liderado por hombre. Los bailes fueron desgarradores, cada movimiento y cada taconeo fue más fuerte que el anterior. La voz cantante de Inma la Carbonera formó un contexto de desesperación, e incluso a veces de tristeza. Los cantos fueron el reflejo más humano y sensible de esta tribu de mujeres. Los instrumentos fueron claves para acompañar los sentimientos. Los tambores, acompañados por las voces de las artistas, sonaron cada vez que las amazonas querían ser escuchadas y la flauta y la guitarra sonaron en los momentos más reflexivos de la historia.

El texto de la obra, factor más secundario, narró leyendas y mitos de la mitología griega desde la perspectiva de las guerreras. Los gritos de las amazonas pedían igualdad y justicia para su pueblo, un mensaje totalmente adaptable a la situación actual de la mujer en la sociedad. Las letras, a cargo de Luz Valenciano, fueron monólogos con un carácter poético. "No se venga a la muerte si no es a través de la vida", así fue una de las últimas frases del espectáculo, en el que las amazonas acabaron con sus vidas, hartas del sufrimiento constante que padecían.

Esta producción de AndanZas-TNT, y bajo la dirección de Juana Casado, acabó en su primer día con el público en pie después de más de una hora de teatro, música y danza sin descanso.