Ante un aforo completo para el que se habían agotado las localidades desde hacía semanas, el pianista británico James Rhodes ofreció ayer un concierto de carácter benéfico en la Sala María Cristina de la Fundación Unicaja, cuya recaudación se destinó a la Asociación Nena Paine y con la Fundación Save the Children.

Para dar cuenta del carácter social, además de musical y cultural, de la velada, el propio Rhodes, junto a la responsable de Solidaridad Social y Educación de la Fundación Unicaja, Ana Cabrera, hizo entrega simbólica de los cheques a los representantes Asociación Nena Paine y Save the Children ya antes del concierto, en el que deleitó y conquistó al público congregado con su conmovedora ejecución.

James Rhodes en la Sala María Cristina este sábado.

En lo estrictamente musical, James Rhodes interpretó principalmente piezas de Bach, Chopin y Beethoven, en consonancia con la gira nacional de conciertos en la que se inscribió el recital de la Sala María Cristina. Así, la música interpretada por Rhodes pasó durante su actuación desde la interioridad de Beethoven, a la espiritualidad de Chopin, y al alegre y grandilocuente mundo de Bach, sumergiéndose en el universo de estos grandes compositores.

También hizo gala el músico británico de su calidad de divulgador musical, una materia en la que brilla especialmente tanto en su faceta de escritor como en su participación en los medios de comunicación. La música mostró así en Málaga su lado más transformador.