Por más que algunos se empeñen en defender lo contrario, la poesía y la imagen son aliados estratégicos y necesarios desde que a la humana criatura le dio por imaginar. Ejemplos ha dado la Historia por miles, pero pronto verá la luz uno significativamente revelador: se trata del largometraje documental El poeta sin tiempo, producido por el colectivo El Árbol Bocabajo, dirigido por los realizadores malagueños Nacho Sánchez y Jorge Peña y dedicado en cuerpo y alma al poeta antequerano José Antonio Muñoz Rojas, cuyo centenario se celebra el próximo 9 de octubre. Será en el marco de los actos conmemorativos de la efeméride cuando se estrene la película en la misma Antequera; de hecho, el 8 de octubre, en la inauguración de la exposición que rendirá homenaje al autor de Las cosas del campo en la iglesia de Santa Clara del municipio, organizada por la Consejería de Cultura, se proyectará un fragmento de la obra como adelanto. Para este acto está prevista la presencia del presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán.

El también antequerano Nacho Sánchez explicó a este periódico la naturaleza del proyecto, que comenzó a desarrollarse en diciembre del año pasado y cuyo montaje se ultima estos días. El poeta sin tiempo pretende indagar en los procesos creativos del propio Muñoz Rojas, y lo hace a partir de la primera musa del escritor: el campo. "Los paisajes de la Vega de Antequera, por los que Muñoz Rojas ha paseado tanto antes de sentarse de escribir sus poemas, son protagonistas esenciales del documental. Hemos grabado imágenes de la Peña de los Enamorados en las cuatro estaciones del año para registrar todas las tonalidades que se van modificando con el paso del tiempo, porque ahí se encuentra buena parte de la razón de ser de su obra. La fotografía, en este sentido, es uno de los elementos más cuidados de la película", apuntó el realizador. Aunque la huella de la biografía del poeta ha llevado al equipo a prolongar el rodaje en Madrid, Sevilla, Jerez y Valencia, son los paisajes rurales cotidianos, siempre sorprendentes a ojos dispuestos al asombro, los que alimentan esta búsqueda del sentido poético último que atañe al hombre.

Junto al entorno, los otros protagonistas son las voces. Sánchez y Peña han entrevistado a familiares, escritores y expertos relacionados con el mundo aparentemente sencillo pero de abrumadora profundidad de Muñoz Rojas, aunque lamentablemente el propio poeta no ha podido participar por su delicado estado de salud. Ahí están, sin embargo, los poetas José Mateo, Fernando Ortiz, María Victoria Atencia, Antonio Carvajal y Álvaro García, el director del Centro Andaluz de las Letras Julio Neira, el editor Manuel Borrás, la investigadora Clara Martínez Mesa, el pintor Medina Galeote y el hijo del poeta y fotógrafo Eduardo Muñoz, entre otros. Todos ellos glosan la figura de Muñoz Rojas en los paisajes de la misma Vega de Antequera, a donde fueron trasladados por el equipo para el rodaje. La presencia del homenajeado, traductor igualmente de buena parte de los grandes poetas ingleses de la primera mitad del siglo XX e introductor de su obra en España, queda materializada en un abundante archivo fotográfico y en unas imágenes grabadas por su familia en su casa de Antequera la pasada Navidad en las que aparece practicando su gran pasión: la lectura.

La Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, el Ministerio de Cultura (a través de la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales) y el Centro de Tecnología de la Imagen de la Universidad de Málaga participan en la producción de este documental, si bien ésta aún se mantiene abierta a la entrada de nuevas ayudas y patrocinios. La música corre a cargo del compositor sevillano Adolfo Langa y el cantaor Miguel Poveda ha cedido uno de los temas que estrenó en 2007 en Antequera a partir de los versos de Muñoz Rojas. Que bien valen un siglo. Sin tiempo.