Rafael Urquizar lleva la Semana Santa de Málaga a la moda de Madrid: "Es la tradición, pero también es la vanguardia"

La Semana Santa malagueña se ha podido respirar en el Madrid Arena a través de la pasarela. El diseñador Rafael Urquizar consiguió trasladar la tradición de su tierra natal, un "pedacito de ella", a través de la moda, transformando en tejidos, colores, olores y música las emociones que envuelven a Málaga en esas fechas tan señaladas. "La colección se llama Parasceve, porque está inspirada en la luna de Parasceve, que es la primera luna llena de primavera, y que coincide con lo que es la noche entre el Jueves y el Viernes Santo", explicó el creador en una entrevista con este periódico.

Su nueva colección Primavera-Verano 2026 reúne 36 diseños en los que tradición y modernidad dialogan bajo su sello de elegancia contemporánea. Urquizar quiso trasladar a la pasarela la emoción de una de las noches más intensas del calendario andaluz: "Está inspirada en los olores, inspirada en la gente, inspirada en todo lo que vivimos durante esa noche y lo que vivimos a partir de ese cambio de luna". En un Madrid Arena repleto de influencers, clientas, medios y representantes institucionales, el malagueño demostró que la Semana Santa puede convertirse en un lenguaje universal desde la moda.

La paleta cromática jugó un papel clave. Según el diseñador, la Semana Santa tiene unas "variantes muy contradictorias", porque tiene una que es de "cultura, de fe, de esperanza", y todo ello junto hacen que hayan generado los coloridos: "Desde la luz, con los blancos, con los malvas, hacia los rojos, que va más a lo que es la pasión, y luego mucho a lo que es el negro, que va a ser luz total de la noche". Tejidos como el crep, la gasa o el encaje se sucedieron en siluetas que evocaban tanto la espiritualidad como la vanguardia.

La experiencia sensorial no se limitó a lo visual. Urquizar anunció antes del desfile un detalle que no quería que pasase desapercibido: "El olor de incienso es una cosa que me encanta y va a estar presente, eso es como primicia, pero va a estar presente desde el primer momento en el desfile". La fragancia se unió a la música en directo del quinteto de metales Lignum Brass, que interpretó marchas procesionales y piezas sacras adaptadas a su timbre característico.

El momento culminante llegó con la interpretación de La Esperanza de María o una recopilación de marchas icónicas de la Semana Santa como La Madrugá, Virgen del Valle o Amarguras, que envolvieron la pasarela en solemnidad. "Nosotros en Málaga a lo mejor lo tenemos como mucho más interiorizado, pero lo que quiero conseguir en Madrid es meterles en ese mundo y que entren al desfile y que comprendan", subrayó el diseñador.

Urquizar insistió en que no buscaba caer en estereotipos. Aunque está inspirada en la Semana Santa, o parte de la Semana Santa, defendió que es una colección "muy vanguardista". "No nos quedamos en el tópico de la Semana Santa, no vamos a ver nazarenos en la pasarela", afirmó. La propuesta se planteó como un homenaje desde la emoción más personal, con respeto y sin clichés: "Habrá gente que a lo mejor diga que no le recuerda mucho a la Semana Santa, pero es lo que a mí me evoca".

El proceso creativo, comentó, surgió de manera orgánica. Empezó por el primer traje y avanzó poco a poco con los demás: "No me planteo lo que puede ser la idea de colección, pero hago una primera prenda y esa primera prenda es la que va expirando toda la colección". En este caso, la inspiración no supuso dificultad: "Siempre me ha gustado la Semana Santa y es por eso que no me ha costado nada, tenía muchas ganas de hacerla, de inspirarme en lo que es la Semana Santa".

Su intención fue clara: emocionar. "Quiero que les llegue dentro, que desde que entren y huelan ese olor de azahar y de incienso, y después con la música y todo eso, se metan dentro de ese mundo que quiero crear", señaló. Con Parasceve, el diseñador celebró además sus 40 años de trayectoria, coincidiendo con el 40 aniversario de la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid.

Impulsado por Málaga de Moda, el Ayuntamiento de Málaga y el de Madrid, y con la colaboración de la Escuela Antonio Eloy y el Instituto IDEM, el desfile reforzó el vínculo de Urquizar con su tierra. "Yo pienso que todo, que es la luz, que es también la cultura, que es la tradición, pero que también es la vanguardia", afirmó sobre lo que en su colección identifica a Málaga.

Nacido en 1971, formado en Esmod International Fashion Group Paris y con una carrera internacional que le ha llevado a recibir la Aguja de Oro y trabajar en firmas como Pedro del Hierro, Rafael Urquizar mantiene su atelier en Málaga con una sucursal en Sevilla. Con Parasceve, reafirma su "compromiso con la excelencia artesanal, la innovación y el respeto a la herencia cultural andaluza, proyectando desde Málaga al mundo una moda con identidad propia y vocación internacional".