Un verano de sagas literarias
En la época estival el género más vendido en Málaga es la narrativa y, sobre todo, en formato de bolsillo · Las librerías se adaptan al cambio tecnológico ofreciendo el ejemplar digital a través de sus páginas web
Los libros por suerte no se van de vacaciones, al menos, no durante este verano. Las estanterías de las librerías están preparadas para proveer de lectura a todo aquel que se acerque al umbral de estas tiendas. Las novedades, además, son muchas. "Este es el verano de las sagas", así explica Isabel Hernández, directora de La Casa del Libro en Málaga, que la mayoría de los libros que ocupan el top ten de "los más vendidos" sean la trilogía de narrativa erótica escrita por E. L. James y compuesta por 50 sombras de Grey, 50 sombras más oscuras y 50 sombras liberadas. Además, la salida de Danza de dragones, el último tomo de la serie Canción de hielo y fuego, "ha supuesto un repunte en la venta de estos cinco libros", siendo el último el más vendido. Esta saga debe su popularidad, en parte, a que su primera novela, Juego de Tronos, se ha convertido en una de las series más seguida de estos tiempos.
Hernández cuenta también que es la novela "lo que más se vende durante el verano", sobre todo "los best-sellers de siempre". "En Málaga, en la época estival, se venden libros para el disfrute", apostilla.
Juan Manuel Cruz, dueño de Rayuela y presidente de la Federación Andaluza del Libro, añade a la lista de los más vendidos El abuelo que saltó por la ventana y se largó, una novela de Jonas Jonasson que cuenta las peripecias de un anciano de 100 años que, tras escapar de la residencia donde vive, emprende un viaje lleno de imprevistos. "Esta novela se ha vuelto a rescatar, pues lleva ya unos meses en el mercado", explica Cruz. Hernández, por su parte, añade que "la vuelta" de este libro, que ya se vendió "muy bien" hace unos meses se debe a "las recomendaciones del boca a boca."
Tanto Hernández como Cruz destacan "el aumento de la venta de libros de bolsillo en verano", pues "se transporta mucho mejor", aclara el librero que explica que la salida en este formato de El tiempo entre costuras de María Dueñas y Dime quién soy de Julia Navarro ha hecho que repunten las ventas de ambos títulos.
A las sagas ya nombradas por la directora de La Casa del Libro, Juan Manuel Cruz añade Los juegos del hambre de Suzanne Collins. Una novela que "está triunfando entre el público más joven", comenta.
A la hora de hablar del número de clientes Virginia López, dependienta de la librería Luces, reconoce que las dos últimas semanas han sido "más fuertes", para explicar este repunte en las ventas López argumenta que son "el turismo" y "la venta de cuadernos de vacaciones para los niños" las causas del aumento del volumen de negocio en la librería en la que trabaja.
Con la crisis económica acechando a la gran mayoría, estas tiendas se ven obligadas a proponer ofertas y a diferenciarse de los demás negocios de este tipo. Eso lo sabe bien Isabel Hernández, que explica que en La Casa del Libro hacen mucho hincapié en la "atención al cliente", "intentamos estar siempre pendientes de si necesitan algo o de si quieren que les recomendemos algo que se adecue a sus gustos", añade. Además, en esta librería han habilitado un rinconcito con "libros para paladares exquisitos", apunta Isabel. En él se encuentra, sobre todo narrativa, pero también algún cómic. "Son libros que pretenden proporcionar más experiencias, aparte de la lectura", comenta la directora de La Casa del Libro.
En cuanto a la adaptación a las nuevas tecnologías, es decir, la implantación del e-book, algunos comercios llevan adelanto con respecto a otros. La Casa del libro, por ejemplo, sacó a la venta el pasado año su propio dispositivo, Tagus. Además, desde su página web (www.casadellibro.com) se pueden comprar los libros para insertarlos en el libro electrónico. En la tienda, un cartelito avisa que ese libro analógico también está disponible en su versión digital. El caso de Luces es distinto, desde su sitio web (www.librerialuces.com) se puede acceder a otras librerías desde las que sí se pueden adquirir dichas obras.
A partir de aquí sólo queda esperar que los libros, este verano, no queden relegados a los anaqueles del olvido.
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