Notas al margen
David Fernández
Del cinismo de Sánchez a la torpeza de Feijóo
EN el final de poema así denominado, León Felipe, escribe: "y que el miedo del hombre…/ ha inventado todo los cuentos. / Yo no sé muchas cosas, es verdad, / pero me han dormido con todos los cuentos… y sé todos los cuentos".
Siempre me ha gustado, y cada día lo repito más, tanto por las cosas grandes, graves, que nos pasan, como por las pequeñas. Vamos de cuentos: me escandaliza el libro de esa colección llamada Pequechistes que, editado desde 2009, lo titulan Sobre chicas (sólo para chicos), sin que hasta ahora nadie se haya dado cuenta de su existencia en las librerías y seguro que incluso se regala con regocijo a los chicos los suyos y a las chicas los correspondientes; porque los chistecitos, que no voy a reproducir, son sexistas en ambas direcciones, peor con las mujeres, porque ya se sabe que somos, preferentemente, "sujetas de uso y consumo". Asombra, si cabe aún más, las explicaciones de los editores: "Son los típicos cuentos que se cuentan entre chicos". Eso es el machismo, reiterar chistes denigrantes como si fuera normal. Y luego nos preguntamos por qué sigue existiendo tanta violencia machista. ¿Qué otra cosa se va a dar si desde la cuna los educamos así, si los volvemos a llevar a colegios que segregan por sexos, financiados con fondos públicos, excepto en Andalucía? ¿De qué nos extrañamos si suprimimos Educación para la Ciudadanía en los colegios e incluimos de nuevo la religión como "asignatura" obligatoria?
¿De qué nos sorprendemos si el director de la RAE dice que ellos con el Diccionario no pueden corregir el machismo ni el racismo de la sociedad porque ésta lo es, pero se rasgan las vestiduras cuando queremos cambiar el lenguaje sexista y racista que tanto prolifera?
Y por seguir con cosas "banales": hay que ver la que se ha liado en el mundo entero con la foto de Obama, Cameron y "la rubia nórdica", como ha sido denominada la primera ministra danesa, más "los celos" de Michelle Obama y "la varonil y justificable actitud de él". ¿Que todo ha venido determinado por la falta de respeto en el funeral de Mandela que pudieron demostrar los tres cual si fueren adolescentes? Puede ser, pero que si ella no es guapa y rubia no tiene esta repercusión. Hasta el autor de la foto ha tenido que salir explicando "la naturalidad" de la misma, el largo funeral y el ambiente festivo con el que los african@s lo realizaron. Estamos mal, en lo grande y en lo, aparentemente, pequeño.
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