Cambio de sentido
Carmen Camacho
Zona de alcanfort
TRAS estos días de Semana Santa, y estando cada vez más cerca las elecciones municipales del 24 de mayo, me pregunto por qué Mariano Rajoy tiene tanta fe en que va a ganar dichos comicios. Optimismo presidencial difícil de digerir por muchos ciudadanos de a pie parados, recortados, desahuciados, dependientes, preferentistas… que no damos crédito a la alegría de Mariano, y menos aún tras su batacazo electoral en Andalucía, donde el PP ha perdido 17 escaños, lo que ha desatado una crisis interna en un partido que parece desunirse por momentos y que ha pasado del poder absoluto al miedo real a la derrota…
Pero Rajoy permanece al margen del fracaso y sin prácticamente autocrítica, y está convencido de que el resultado de las municipales será muy diferente al de Andalucía, optimismo fundamentado en las encuestas -incluidas las del CIS- que mantienen al PP como primera fuerza política a pesar del desgaste, a la aceleración de la economía -más evidente conforme avance el año-, a que la situación política andaluza -según él- no es extrapolable al resto de España, a que gobiernan en la mayoría de ciudades y comunidades y a la experiencia de gobierno.
No obstante, las elecciones municipales son las elecciones de las ciudades y pueblos de la gente y el resultado puede ser totalmente imprevisible dado que los ciudadanos votan a personas y no sólo a formaciones políticas. Por eso es el momento de hablar menos de logros macroeconómicos y más de las cuestiones de a pie que nos interesan.
Puede que el PP se mantenga como la fuerza más votada y el PSOE suba, aguantando el bipartidismo el empuje de las nuevas formaciones, puede que Podemos se esté desinflando -como he dicho otras veces- por culpa del tándem Errejón-Monedero, de la soberbia de Pablo, de la falta de solidez de su programa, de la sospecha de chavismo y del auge de Ciudadanos, partido preferido por ex votantes del PP frente a Podemos. Pero a pesar de estos augurios, plasmados incluso en la última encuesta de abril de NC Report para La Razón, lo que sí tiene que aprender el PP de Mariano es a pactar, porque probablemente la llave de los próximos gobiernos municipales, autonómicos y nacional la tengan Ciudadanos o Podemos, lo que puede dar gobiernos al PP o al PSOE.
Pactar es un ejercicio de humildad que no sólo necesitan quienes han tenido poder absoluto, sino la propia ciudadanía, que verá moderado el mando a golpe de Real Decreto y el apruebo lo que quiero porque tengo mayoría absoluta, por el pienso más en el consenso y en contentar a todos los sectores, aunque sea por obligación y no por sentido de Estado.
Por ello, la fe de Mariano debería combinarse con la humildad que infunden los pactos en quienes sólo son servidores públicos…
También te puede interesar
Cambio de sentido
Carmen Camacho
Zona de alcanfort
Gafas de cerca
Tacho Rufino
Pollos de Carrier
Su propio afán
Enrique García-Máiquez
Hasta el rabo todo es toro
Postrimerías
Ignacio F. Garmendia
Libro del año
Lo último