La filosofía de Teresa Porras

La concejal de Servicios Operativos del Ayuntamiento de Málaga continúa en el foco por la mecha que ha prendido por las continuas quejas por problemas de suciedad, sobre todo en las redes sociales. Teresa Porras suele resolver los conflictos al ataque y así lo ha intentado otra vez. Los vecinos y los partidos de la oposición han estado en el centro de su dialéctica. Todo menos afrontar la evidencia desde hace muchos años: entre las virtudes de la capital no figura la de la limpieza. Ni antes, cuando era una concesión mixta, ni ahora cuando la empresa encargada es municipal. En las últimas horas también el comité de la sociedad Limasam se ha sumado al debate para denunciar falta de personal y de medios. Aunque no es su fuerte, Porras casi ha optado por la filosofía para describir la situación del verano: puede haber puntos negros, “como en todas las ciudades”; “hay mucho más turismo, mucha más gente que sale a la calle, se hace más vida en la calle que en días normales”. Además, resulta que Málaga padece sequía y “lleva sin llover muchos meses. No es lo mismo una ciudad que llueva o una ciudad que no llueva”. Ni Kant la superaría.