Notas al margen
David Fernández
Del cinismo de Sánchez a la torpeza de Feijóo
LOS consejos de administración de Cajasol y Caja de Guadalajara aprobarán hoy, en sendas reuniones, la integración de ambas entidades que ha venido siendo negociada con discreción por sus gestores. Se trata de la primera fusión entre cajas de ahorros de distintas comunidades autónomas desde que el Banco de España promueve un proceso necesario de fusión de cajas tendente a hacer más sólido el sistema financiero del país y ganar dimensión en la actual coyuntura de crisis. El regulador ha dado su aprobación a la operación, que también cuenta con el respaldo de las respectivas autoridades políticas, la Junta de Andalucía y el Gobierno de Castilla-La Mancha. La fusión se hará por absorción de la Caja de Guadalajara por Cajasol, lo que resulta enteramente lógico a causa de la diferencia de envergadura de las dos entidades. El proceso será rápido, ya que está previsto que las asambleas generales celebren sus plenos de ratificación el próximo mes de abril, quedando en manos de un comité de integración compuesto por cuatro directivos de la caja andaluza y dos de la manchega. Las dos cajas mantendrán sus marcas comerciales al término del proceso fusionador. Aparte de la firme voluntad de los gestores de ambas cajas, el proceso se ha visto facilitado precisamente por el hecho de que, al operar fundamentalmente en territorios distintos (Caja Guadalajara funciona en esta provincia, Madrid y Toledo), no se produce apenas solapamiento de oficinas, lo cual, a su vez, evita la necesidad de proceder a reducción de sucursales y plantillas. La caja resultante contará con 31.000 millones de euros en activos, situándose entre las doce primeras de España en este aspecto. Mientras tanto, continúan las negociaciones de Cajasol con las dos cajas ubicadas en Extremadura, con las que se espera culminar una fusión de mayor fuste, también en la línea de propiciar fusiones en instituciones financieras de distintas comunidades autónomas y situarse en una buena posición en el mapa financiero nacional. Se trata de un servicio a los clientes de Cajasol, respaldados por una entidad fuertemente arraigada y de garantizada solvencia, y a la sociedad andaluza, necesitada de instituciones potentes para acometer sus proyectos de carácter estratégico.
También te puede interesar
Notas al margen
David Fernández
Del cinismo de Sánchez a la torpeza de Feijóo
Las dos orillas
José Joaquín León
Sumar tiene una gran culpa
Manual de disidencia
Ignacio Martínez
Moreno no sabe contar
Crónicas levantiscas
Feijóo y otros mártires del compás
Lo último