Aida Blanes es la concejala de Turismo del Ayuntamiento de Torremolinos, que se marca como objetivo tras afrontar uno de los veranos más duros para la ciudad debido a la pandemia de Covid-19, la promoción digital y el fomento de los segmentos gastronómico y de compras para mantener la actividad turística durante la temporada baja.

–¿Qué valoración hace del verano con septiembre concluido?

–Ha sido un verano muy duro. Es cierto que las expectativas iniciales eran bajas, pero en el momento en el que se abrió la posibilidad de que viniera sobre todo un turismo inglés y alemán, y al final se acabaron cerrando esas puertas; han caído mucho y el sector ha sufrido muchísimo las consecuencias de esas medidas que han tomado determinados países y que han provocado que el turismo extranjero deje de venir.

–¿Cuál ha sido la salvaguarda?

–Hemos sobrevivido gracias sobre todo al turismo procedente de Andalucía, y evidentemente la tarta es demasiado grande como para que se pueda cubrir.

–¿Qué perfil ha presentado?

–Por una parte, han habido muchas familias de las zonas próximas de Andalucía, y por otra, un gran porcentaje de turismo LGTBI, que para este municipio supone un gran aliciente y una gran parte de los turistas que recibimos. También, y gracias a las conexiones que tenemos de AVE y demás, gente de Madrid y algunas zonas del interior.

–¿Cómo se presenta el otoño?

–El otoño se presenta todavía más duro que el verano. Además, las restricciones que está poniendo ahora la Junta de Andalucía y las previsiones de que pueda haber algún paro en la movilidad entre provincias o comunidades autónomas son muy duras.

–¿Qué previsiones hay para los puentes?

–Nosotros teníamos eventos bastante potentes en los puentes del otoño y del invierno y se han tenido que cancelar y esperamos que en Navidad se puedan tener. Las expectativas son que seguimos pensando en ese turismo de proximidad, de Andalucía, que pueda seguir viniendo.

–¿Qué estrategias se marca el Ayuntamiento de cara a la temporada baja?

–Estamos haciendo campañas específicas para el turismo gastronómico y de compras, pero también se va a fomentar el turismo de cara al año que viene y vamos a hacer planes de sostenibilidad y de accesibilidad turística. Estamos trabajando en conseguir el sello de Turismo seguro y estamos dentro de la Red de destinos turísticos inteligentes. Trabajar sobre todo en la sostenibilidad, que llama mucho la atención a todos los turistas que provienen del norte de Europa, Estados Unidos o Canadá, y que son los mercados en los que queremos incidir de cara al año que viene.

–¿Cómo se van a potenciar estos segmentos?

–En el segmento de compras, estamos poniendo en marcha una herramienta de Marketplace local que va a permitir no solo las compras por Internet en todos los comercios locales, sino que cualquier persona que está en un barrio pueda acceder a comercios de otro, saber llegar y que todo el mundo tenga acceso a la oferta comercial. También queremos geolocalizar toda la oferta turística para que la gente cuando venga a Torremolinos pueda descubrir locales y negocios y lo vamos a hacer por sectores. Habrá una parte del sector gastronómico, de los negocios y de los comercios locales.

–¿Con qué acciones vais a atraer al turista de proximidad?

–Ahora mismo, utilizar los recursos que tenemos. Trabajamos mucho en lo digital y no es un momento para hacer grandes gastos, cuando muchísimas familias están sufriendo. Además, teniendo conversaciones con otras provincias, diputaciones y ayuntamientos para poder hacer promoción en los mismos con el menor coste posible y una campaña de publicidad en los medios de comunicación más cercanos.

–¿Cuántos hoteles prevéis que van a cerrar en este período?

–Ya hay muchos hoteles que han cerrado durante septiembre, que nunca pensábamos que íbamos a ver cerrados, porque la situación económica que tenían y de reservas era insostenible. Creemos que los hoteles pequeños pueden aguantar un poquito más, sobre todo para acoger a este tipo de turismo del que estamos hablando, pero los hoteles grandes en su gran mayoría ya están cerrados

–¿Cómo afectará al empleo?

–Siendo nuestra principal industria, afecta de una forma muy negativa y muchísimas familias de Torremolinos viven directa o indirectamente del turismo. El Ayuntamiento trabaja en la línea de que se puedan mantener los mayores empleos posibles, y hemos pedido tanto a la Junta de Andalucía como al Gobierno central planes de empleo y formación de reciclaje para que esos trabajadores se puedan adaptar.

–¿Cuál va a ser la tónica de promoción para el invierno?

–Seguir trabajando con el sector privado y el turístico mano a mano. El Ayuntamiento sigue en contacto permanente, tanto con el propio sector como con las asociaciones relacionadas, porque creemos que esto es algo que hay que trabajar de manera conjunta.