La vicepresidenta primera del Gobierno, ministra de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Carmen Calvo reivindicó ayer la figura de la pensadora y filósofa veleña María Zambrano “una mujer que hay que situar en el presente”, porque “está más vigente que nunca”.

Durante su intervención en el curso “María Zambrano, hoy”, que la Universidad de Málaga celebra en Vélez-Málaga, la ciudad natal de Zambrano, Calvo hizo un paralelismo entre el tiempo actual y el que vivió la escritora malagueña: “A ella le tocó vivir un momento difícil que terminó en tragedia y nuestros tiempos también son complejos”, afirmó.

“Volver la mirada hacia su obra en estos momentos tan ruidosos, en los que se habla pero no se piensa, nos lleva a un momento de reflexión y quietud en el que el silencio es una verdadera propuesta de revolución”, ha enfatizado la ministra, quien admitió que es una “admiradora y lectora apasionada” de la obra de la veleña.

En este sentido, ha reiterado la necesidad de “volver una y otra vez al pensamiento zambraniano” porque “su compromiso no era algo escrito, su compromiso lo pagó con 45 años de exilio. Era compatriota de los que la dictadura dejó sin patria, de los que entregaron sus vidas por derechos y para defender la democracia”, aseveró manifestando “su compromiso personal y político con Zambrano”.

Desde allí, Carmen Calvo se trasladó a la Sala del Pósito para visitar la exposición antológica del pintor Ginés Liébana organizada por el Ayuntamiento.