Fuengirola es una de las primeras ciudades españolas en adaptar sus plazas de aparcamiento para personas con movilidad reducida a la normativa vigente en materia de accesibilidad, para lo que ha impulsado un plan municipal con el que se han practicado 250 intervenciones en estacionamientos y 40 en paradas de autobús, según ha informado este miércoles la alcaldesa Ana Mula.

La regidora ha destacado que “Fuengirola es una ciudad abierta y para todos y ese espíritu acogedor se evidencia con el tremendo esfuerzo que llevamos años realizando en materia de accesibilidad y de construir un entorno cada vez más sensible y adaptado a aquellas personas que tienen necesidades especiales”.

En este sentido, la mandataria ha recordado que “en Fuengirola fuimos pioneros en Andalucía en contar con una playa para discapacitados, contamos con dispositivos para personas con problemas de audición en nuestros auditorios municipales y somos muy rigurosos en materia de legislación de accesibilidad en todas las obras de remodelación que ponemos en marcha”.

A ello ha sumado que “hemos dado un nuevo paso al frente en esta materia con nuestro ‘plan de adaptación de aparcamientos y paradas de autobús’ para personas con movilidad reducida”, gracias al cual desde hace unas semanas Fuengirola cuenta con sus estacionamientos para personas con movilidad reducida adaptados a la legislación vigente, en total 350. 

A este respecto, Mula ha indicado que debido a las características urbanísticas de varias zonas de Torreblanca, “con calles desarrolladas hace muchos años y sin margen ni espacio para implantarlo”, no ha sido posible desarrollar este plan en varios enclaves, si bien “estamos estudiando la forma de conseguirlo en el futuro”. 

De estas 350 plazas de estacionamiento, sólo 116 cumplían la normativa, mientras que de las 40 paradas de autobús de la ciudad, ninguna estaba adaptada aún a la legalidad vigente en la materia. 

En este sentido, Mula ha detallado que ha sido necesario “intervenir en unos 250 aparcamientos dedicados a estas personas con necesidades especiales, así como en unas 40 paradas del servicio de autobús urbano”. 

“En muchos casos, ha sido necesario alargar la acera y eliminar aparcamientos para poder cumplir la normativa, un sacrificio que creo que todos entendemos para hacer más fácil la vida de aquellos fuengiroleños y visitantes que lo tienen más complicado para desplazarse”, ha explicado.