Investigarán si hay amianto en una fábrica abandonada

La Fiscalía de Medio Ambiente ha abierto diligencias de investigación penal por un presunto delito contra la salud por contaminación con amianto en la antigua fábrica de ladrillos de El Prado en Vélez-Málaga. Las instalaciones se cerraron hace cinco años como consecuencia de la crisis de la construcción y tras su abandono comenzaron a saquearla. En verano del pasado año, el concejal del grupo mixto José Luis Gámez denunció los hechos ante el Servicio Andaluz de Salud y el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil al entender que el desmantelamiento de las instalaciones sin las correspondientes medidas de seguridad estaba dando lugar al esparcimiento en el entorno de las partículas de amianto existentes en las cubiertas de las placas de fibrocementos de la nave industrial. Concretamente, según estimó, existían 15.000 metros cuadrados de cubierta, en su mayoría de uralita.

Gámez solicitó en varias ocasiones a la administración local que tomara medidas para evitar la situación que, según denunció, podía afectar a los vecinos de la zona y a los usuarios del centro comercial o del parque acuático que están muy próximos a este enclave abandonado. "Es un paso hacia delante porque tanto el Ayuntamiento como la administración sanitaria van a tomar nota y tendrá que intervenir en ese proceso de investigación que ya se ha abierto. Estamos muy satisfechos de que por fin la Fiscalía haya admitido a trámite esta denuncia que llevamos cursando desde hace dos años", manifestó Gámez quien espera que se pueda "liberar de amianto la zona" y "no tener ese peligro constante encima".

No obstante, el Ayuntamiento llevó a cabo las mediciones pertinentes y verificó que no existía ningún riesgo para la salud. Entonces, al tratarse de una empresa privada, cuyos propietarios estaban inmersos en un procedimiento concursal, exigió la retirada de las cubiertas del edificio para evitar cualquier situación que pudiese tornase peligrosa. El edil veleño recordó que en diciembre de 2001 se prohibió en España la comercialización y utilización del amianto blanco.