El Ayuntamiento de Marbella ha obtenido la calificación más alta en solvencia económica que otorga la consultora AFI (Analistas Financieros Internacionales) que estudia la calificación crediticia de las corporaciones locales y las compara con las comunidades autónomas y el ámbito nacional. Según anunció ayer el concejal de Hacienda, Félix Romero, el Consistorio marbellí habría obtenido la más alta, la AAA, con un total de 93 puntos porcentuales, por delante de ciudades como Madrid o Barcelona. “Este dato acredita, aún más si cabe, la situación no solo dentro del ámbito económico y financiero de esta administración, sino también la evolución y la gestión de los propios recursos públicos”, manifestó el edil.

Marbella tiene una puntuación por encima de ciudades como Madrid o Barcelona

“Hemos ido evolucionando, por ejemplo, en cuanto a la calificación de pagos, desde 2009 a 2018. Así, el Ayuntamiento ha ido pasando en estos ejercicios de 10, a 20 a 60 y a 80, hasta llegar a la máxima obtenida”, expuso la alcaldesa, Ángeles Muñoz, quien explicó que la empresa tiene en cuenta en su análisis una serie de parámetros como la calificación en ahorro bruto, la de la deuda viva, la del remanente de Tesorería y la de los pagos. “La clasificación nos permite estar en el ránking de las entidades locales que cumplen a rajatabla con sus obligaciones financieras y fiscales y con el ámbito económico en cuanto a la preparación de los presupuestos y la ejecución de los mismos”, apuntó.

Por el contrario, el concejal socialista José Ignacio Macías criticó que la regidora “ha anunciado como todo un logro” que una consultora haya otorgado a Marbella una triple A en cuanto a la calificación crediticia, cuando según él “han reconocido que ya la tenía desde 2014, por tanto también durane los dos años de Gobierno de José Bernal”.

Por otro lado, en relación a los presupuestos, Muñoz señaló que tras su aprobación inicial en el pleno celebrado el pasado jueves estos ya han sido publicados en el Boletín Oficial de la Provincia de Málaga (BOPMA), abriéndose un plazo de 15 días para la presentación de las alegaciones. Una vez vencido el plazo, el equipo de gobierno confía en que las cuentas de 2020 estén aprobadas de forma definitiva antes de que finalice el año de forma que entren en vigor el próximo 1 de enero.

Los presupuestos, que se aprobaron con el único voto a favor de los miembros del equipo de gobierno y en contra de la oposición formada por PSOE, OSP y Ciudadanos, ascienden a 295 millones de euros, 12 millones más que en el presente ejercicio, y contemplan más de 40 millones de euros en inversiones para la creación de nuevos equipamientos públicos en el municipio, de los que 15 corresponden al remanente de Tesorería, además de los diez millones que se reservarán para el Plan de Barrios. “La oposición ha basado su negativa a apoyar los presupuestos alegando que no contemplaban las inversiones de forma realista, cuando lo hacemos con absoluta prudencia”.