Marbella abre un expediente sancionador al Hotel Sisu

El Ayuntamiento de Marbella ha ordenado el cese de la actividad musical del polémico Hotel Sisu, ubicado entre Puerto Banús y San Pedro Alcántara, contra el que ha abierto un expediente sancionador tras detectar varios incumplimientos en los condicionantes de la autorización, según explicó el concejal de Industria, José Eduardo Díaz.

El establecimiento, que acumula varios centenares de denuncias de los vecinos por ruido, contaba con una autorización excepcional que les permitía tener música ambiente durante los meses de verano. Sin embargo, dicha autorización temporal contaba igualmente con una serie de condicionantes, el primero de ellos el de tener un limitador. "Ese aparato registra el funcionamiento de la música durante el periodo que está autorizado y se detectó que el funcionamiento de ese limitador arrancó semanas después de tener la autorización, que se había desenchufado o manipulado determinados días durante los meses de funcionamiento, y también que se había incumplido el volumen y el horario de cierre en determinadas ocasiones", detalló el edil. Estas habrían sido las irregularidades detectadas en el análisis llevado a cabo desde la delegación en una actuación que afecta a más establecimientos de la localidad. "Nos marcamos como prioridad analizar la situación de los locales del municipio donde la convivencia entre los vecinos y el funcionamiento lógico de estos locales de ocio se había roto. Entre ellos se encuentra el conflicto generado en torno al Hotel Sisu, donde vimos que había una serie de molestias y denuncias por parte de los vecinos", señaló.

Una vez detectadas todas estas irregularidades, el Ayuntamiento de Marbella procedió el pasado viernes, a través del departamento técnico de la delegación de Industria, a la retirada de la autorización temporal para el ejercicio de la actividad musical que se estaba llevando a cabo en el local. En lo que se refiere al expediente sancionador, este podría conllevar desde una multa hasta, en el caso de reiterarse la actitud infractora de la música, incluso al cierre del establecimiento.