Muere un ejemplar de garza real atropellado al cruzar la circunvalación

Los primeros ejemplares de garza real (Ardea cinerea), especie calificada como singular, han comenzado a llegar a la Serranía de Ronda y lo hacen de forma trágica. Ayer, miembros de la Patrulla Verde de la Policía Local de Ronda y de agentes de Medio Ambiente, localizaron el cadáver de una garza junto a la zona de Navares y Tejares. Precisamente, por este punto se produce la confluencia de paso del río Guadalevín y la carretera de circunvalación, una dualidad que se considera que en este caso ha sido mortal para este ejemplar.

En un primer momento se pensó que se podría tratar de un caso de envenenamiento, por lo que se procedió a activar el correspondiente protocolo. No obstante, tras una inspección de cadáver por parte de un experto de Medio Ambiente se descartaba que pudiese haber consumido algún tipo cebo con veneno, al no presentar ningún tipo de signo externo que pudiese levantar sospechas.

Aunque la garza real es una especie en expansión, en el término municipal de Ronda su presencia no es demasiado grande, quedando limitada a las proximidades del río Gualevín, dado que necesita de presencia de peces o ranas para su alimentación.

No obstante, una vez que este río confluye con el Guadalcobacín y forma el Guadiaro, la presencia de este tipo de garza es mucho más frecuente, según explican los aficionados a la observación de aves.

Y mientras se produce una muerte, fuentes conocedoras de la actuación, aseguran que la empresa Endesa procedió la pasada semana a realizar trabajos de aislamiento en la línea próxima a las cornisas del Tajo de Ronda, en la que recientemente fallecía un ejemplar de búho real, especie protegida.