Prohíben los vuelos acrobáticos tras las últimas muertes en Vélez

Después de más de veinte años, el Real Aeroclub de Málaga, que gestiona el aeródromo Leoni Benabú de la Axarquía, ha prohibido temporalmente los vuelos acrobáticos sobre este recinto y el área que lo circunda. La medida ha llegado después de que el pasado viernes fallecieran dos personas en un accidente en el que, según los testigos, el piloto realizaba una tabla acrobática. La suspensión de estas prácticas permanecerá al menos hasta que finalice la investigación sobre el siniestro. Posteriormente, la decisión recaerá en los 170 socios que conforman el colectivo.

El alcalde de Vélez-Málaga, Francisco Delgado Bonilla (PP), se reunió ayer con el presidente del Real Aeroclub, Gonzalo Figueroa, para conocer las medidas provisionales que van a adoptar a raíz del siniestro que le costó la vida al piloto Francisco Javier Fernández y a su compañero. El responsable del colectivo resaltó que el hecho de prohibir estos vuelos en el espacio que circunda el aeródromo de El Trapiche es temporal, a la espera de que los técnicos y organismos responsables, caso de Aviación Civil, determinen la causa del suceso.

Una vez se disponga de los informes y la directiva del aeroclub tenga una propuesta sobre lo que se va a hacer respecto a esta modalidad de vuelos, serán los 170 socios del colectivo los que adoptarán la decisión definitiva en una asamblea extraordinaria.

En relación a la seguridad del aeródromo, en el que en abril de pasado año fallecieron otras dos personas, y ha registrado una decena de accidentes en los últimos diez años, Figueroa indicó que por el volumen de operaciones que tiene el aeródromo y el número de siniestros "está en niveles de seguridad normales, lo que no quiere decir que cada vez que suceda un hecho desgraciado no se pongan en revisión todos los procedimientos para intentar darle remedio".

No obstante, aseguró que están "tranquilos", ya que el análisis de los informes sobre los accidentes en el aeródromo en los últimos diez años determina que no existe una causa común de los mismos o un factor importante, caso de las instalaciones, la orografía o el clima de la zona. "En la mayoría de los casos hablamos de errores humanos que han tenido consecuencias fatales", destacó. "Tenemos claro que cada vez que sucede un hecho desgraciado no queda otra que poner todo en revisión e intentar sacar en claro qué es lo que está sucediendo y poner remedio a cualquier ocasión futura que se pueda presentar", dijo el presidente, que expresó la "tristeza" de los socios del aeroclub por las consecuencias del accidente.

Figueroa mostró su comprensión por la alarma que este tipo de siniestros crea entre la población, "pues un accidente de avioneta es muy aparatoso y llama mucho la atención", pero transmitió un mensaje de calma, pues "no estamos dentro de niveles anormales respecto al ratio que pueda haber en otros sitios".

Por su parte, el regidor mostró la intención municipal de hacer todo lo posible para garantizar al máximo la seguridad en torno a este recinto, del que dejó claro que sus instalaciones y pistas "reúnen todas las garantías", al tiempo que expresó la "apuesta decidida" del Ayuntamiento por apoyar la actividad del aeroclub. El regidor ofreció su "máxima colaboración" al aeroclub para garantizar la seguridad y pidió a la ciudadanía que no se cree "una alarma social innecesaria".