Los trabajadores del parque de atracciones Tívoli World, localizado en Benalmádena, han recurrido ante la Sala de lo Social en Málaga del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) el auto emitido por el Juzgado de lo Mercantil número 1 malagueño, que decreta la extinción de los contratos de trabajo de la plantilla, al entender que no es el tribunal competente en resolver el asunto y que los empleados deberían de haber sido asumidos por la nueva empresa propietaria, el grupo inmobiliario Tremón, según ha destacado este lunes la secretaria de Servicios del sindicato CCOO, Lola Villalba.

El recurso de suplicación fue interpuesto "hace más de 15 días" ante el alto tribunal andaluz contra el auto emitido a mediados de marzo, que deriva del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que presentó hace un año el administrador concursal de la Compañía Internacional de Parques y Atracciones (CIPASA), inmersa en un concurso de acreedores necesario desde agosto de 2020, y que dirime el Juzgado de lo Mercantil número 1 de Málaga.

Villalba ha apuntado que en el recurso “alegamos que estamos en contra del expediente de extinción, porque entendemos que ni CIPASA ni el Juzgado de lo Mercantil tienen capacidad para extinguir los contratos de una empresa y de unos trabajadores, que ya de facto deberían de haber sido subrogados -asumidos- por Tremón”.

“No le compete al Mercantil ese expediente de extinción, puesto que esos trabajadores deberían ser de Tremón, no de CIPASA”, ha matizado la sindicalista, quien ha apuntado que “ya se ha trasladado a todas las partes que están personadas en el concurso” la interposición del recurso.

La sindicalista ha señalado que “hemos recurrido el expediente”, remarcando que “aunque lo hemos negociado con la administración concursal, hemos mostrado en el acta que estábamos disconformes” y “se cerró sin acuerdo”, al valorar que el Mercantil no tiene capacidad para extinguir los contratos puesto que “esos trabajadores deben ser subrogados por Tremón, y como tal, la empresa que está en concurso es CIPASA”, y no el grupo inmobiliario.

Sin embargo, ha señalado que “era obligación que el Mercantil resolviera cuanto antes ese expediente para que la gente pudiese cobrar el desempleo”, que “llevan ya más de dos años sin cobrar” tras cerrar el parque de atracciones de Benalmádena sus puertas en septiembre de 2020, por lo que “al menos pueden coger su desempleo o trabajar en otro sitio”.

Por su parte, el presidente del comité de empresa, Juan Ramón Delgado, ha indicado que el recurso se ha presentado porque “no estamos de acuerdo con la actuación de la jueza, y opinamos que si ella no tuvo potestad para reabrir el parque, tampoco la tiene para cerrarlo”, ha valorado.

El sindicato mantiene que los empleados deben ser subrogados

Cabe recordar que CIPASA, vinculada al empresario Rafael Gómez, adquirió el parque de atracciones en 2004 y lo vendió en 2007 al grupo inmobiliario Tremón, una operación que derivó en un conflicto judicial al alegar la primera una falta de pago, por lo que siguió explotando Tivoli hasta la última temporada que ha abierto sus puertas en 2020. En octubre de 2021, el Tribunal Supremo resolvió que CIPASA debía entregar el espacio al grupo inmobiliario Tremón.

Este fallo judicial sirvió para que el sindicato recurriera ante el TSJA al entender que "los trabajadores pertenecen a Tremón" como se acordó en el acuerdo de compraventa de 2007 del parque, y que por lo tanto, "tenían que ser subrogados" o asumidos por el grupo inmobiliario, algo que el alto tribunal andaluz rechazo, por lo que ha sido recurrido ante el Tribunal Supremo y está pendiente de resolverse, ha recordado Villalba.