Provincia

Roban 30.000 euros de la recaudación de las taquillas en la Cueva de Nerja

  • Es la segunda vez en este año que se llevan las cajas fuertes donde se guarda el dinero de la venta tras el fin de semana

Visitantes en la entrada de la Cueva de Nerja.

Visitantes en la entrada de la Cueva de Nerja. / M. H.

Segundo robo en la Cueva de Nerja en lo que va de año. En esta ocasión, los asaltantes se han podido llevar alrededor de 30.000 euros en efectivo de la recaudación de los tres últimos días. Según fuentes de la investigación, la sustracción se produjo en la madrugada de este lunes y fueron los trabajadores de la gruta los que descubrieron los hechos cuando llegaron a la oficina por la mañana para iniciar su jornada laboral.

Según explicaron estas mismas fuentes, las rejas del edificio estaban forzadas y las dos cajas fuertes instaladas en el interior se encontraban abiertas. No había ni rastro de la recaudación del fin de semana ya que el viernes fue el último día que la empresa de seguridad retiró el efectivo procedente de la venta de entradas en las taquillas.

Asimismo indicaron que las instalaciones de la gruta cuentan con medidas de seguridad que no precisaron y que no han funcionado al haber podido ser neutralizadas por los ladrones.

El 8 de enero, tras finalizar el periodo vacacional navideño, la Fundación Cueva de Nerja, informó del robo de tres cajas fuertes de las oficinas administrativas de la institución, que almacenaban el dinero de la recaudación por las visitas a la cavidad en los últimos días y efectivo para el cambio en las taquillas.

Fuentes de la investigación afirmaron entonces que la cantidad sustraída podrán rondar entre los 45.000 y los 50.000 euros. En esa ocasión, la sustracción se produjo entre las 16:30 del viernes y las 8:00 del sábado.

Según explicaron, pese a la presencia de una empresa de seguridad durante esta franja temporal, los ladrones aprovecharon unas obras que se están realizando en la zona de taquillas y accedieron con una escalera empleada en estos trabajos por una ventana superior a las oficinas.

Removieron todos los cajones en busca de las contraseñas de las cajas, se las llevaron y recorrieron unos doscientos metros en dirección a la sierra que rodea la cueva, donde emplearon un pico para abrirlas.

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