El ex asesor de Urbanismo del Ayuntamiento de Marbella y presunto 'cerebro' de la trama de corrupción, Juan Antonio Roca, admitió hoy ante el juez que instruye el caso 'Malaya', Óscar Pérez, que compró un 50 por ciento del equipo de fútbol Xerez Club Deportivo, según indicó su abogado José Aníbal Álvarez, quien apuntó que "no está determinado" que el dinero sea de procedencia ilícita.

Roca estaba citado hoy en calidad de imputado por una pieza separada del caso, junto con el abogado de éste en la operación, Manuel Sánchez Zubizarreta; el hombre que tenía hasta esa fecha los derechos del club, Luis O.; el que supuestamente los adquirió junto con Roca, José María Gil Silgado; el letrado que actuó presuntamente en representación de éste, el empresario José Ávila Rojas y un presunto testaferro del ex asesor marbellí.

Álvarez manifestó a los periodistas que Roca constituyó para dicha compra una sociedad a través de su abogado, Manuel Sánchez Zubizarreta, y añadió que lo que pretendía era "tener una participación por si subía el equipo", aunque al no hacerlo "perdió el dinero que invirtió".

Asimismo, también expresó que el pago se hizo con un cheque de un millón de euros, "que de hecho consta", y dos viviendas que "pertenecían a Roca, pero aún se encontraban escrituradas a nombre de Ávila Rojas".

El abogado manifestó que la defensa no sabe exactamente de qué se acusa a su patrocinado en esta pieza ya que "él mismo ha reconocido la compra" y añadió que "parece ser que todos los negocios de Roca pueden ser ilícitos".

Por otro lado, fuentes cercanas al caso manifestaron que el empresario Ávila Rojas, también imputado en esta pieza, declaró que se trató de una operación "como otras muchas que hizo con Roca y que también ha llevado a cabo con más empresarios". ".

Gil Silgado apuntó a su salida de los juzgados de Marbella que "no hay vínculos y que todo ha quedado aclarado". Fuentes de las defensas aseguraron que en su declaración apuntó que fue una operación "mercantil" dónde él vendía y una sociedad compró, sin tener conocimiento que fuese Roca el que estaba detrás de ésta.

A parte de estos imputados, está también el abogado Manuel Sánchez Zubizarreta que, según se indica en el informe elaborado por la Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal, diseñó desde su despacho de Madrid la operación junto con otro letrado, que defendía los intereses de Gil Silgado y que también se encuentra imputado.

En el documento, la Policía detalla el procedimiento utilizado por Roca para hacerse con la mitad de los derechos societarios y económicos del Xerez, a través de sociedades "instrumentales" como Oven Five SL y Jovibel 2000 SL y se inclina a pensar que a los supuestos participantes en esta operación se les podría imputar un delito de blanqueo.

Así, los investigadores inciden especialmente en el informe, al que tuvo acceso Europa Press, "en la ocultación de la inversión que supuso la adquisición de los derechos sobre el Xerez por parte de Roca y Gil Silgado" al anterior propietario, que recibió "parte del pago" a través de un local en Marbella, presuntamente propiedad de Ávila Rojas.