El reconocido diseñador Philippe Starck, que ayer visitó Málaga con motivo de la inauguración de una exposición sobre su obra en el Centre Pompidou, se refirió a la futura almazara ecológica que ha diseñado y que se construirá en Ronda, un edificio al que hizo referencia asegurando que "será el mejor objeto de mi vida". El proyecto, que recientemente recibió el respaldo del Ayuntamiento de Ronda para iniciar el proceso de la innovación que debe dar origen al mismo, tras lograr los correspondientes informes positivos de las diferentes consejería de la Junta de Andalucía que deben pronunciarse sobre el mismo, supondrá una inversión de unos 18 millones de euros y se situará a un kilómetro del casco urbano rondeño.

En cuanto a la filosofía de su proyecto, Starck también añadió que "me gustaría sintetizar todas las fuerzas de Andalucía en un bloque increíble, que muestre la fuerza de Andalucía y España".

La innovación podría tardar entre 9 y 12 meses en completarse la tramitación

Por último, sobre este proyecto de almazara, que no habla sobre el aceite de oliva, relató que se sentirá "una gran lección de humanidad, y habla de nosotros, de vosotros los andaluces". Y es en el mismo se incluirán elementos que el diseñador considera que son representativos de Andalucía y de su fuerza, como el sol, la tierra, la tauromaquia o los sabios andaluces que crearon un avión mucho antes de que lo hicieran en américa. Un avión que será recreado dentro del complejo. Además, también se incluye un guiño al arte andaluz con un ojo de Picasso, para lo que han tenido que pedir a la familia la consiguiente autorización para su uso en el proyecto.

El diseñador también explicó que tuvo que emplear varios años para conseguir expresar en el proyecto sus intenciones. De momento, antes de poder solicitar la correspondiente licencia de obras al Consistorio rondeño, deberá completar un proceso administrativo que se estima que tendrá una duración aproximada de entre 9 y 12 meses, por lo que para finales de 2017 o principios de 2018 podría terminarse.

Eso sí, en la finca que los promotores han adquirido para este fin ya se han iniciado una serie de movimientos de tierra dentro de los parámetros que sí se permiten en la actualidad y también la plantación de arbolado y construcción de muros. Todo ello representa un trabajo diferenciado del edificio y que sí pueden acometer en la actualidad, además de la reforma de alguna de las viviendas ya existentes en ellos terrenos.