Torremolinos se queda sin perrera al no concurrir ninguna empresa

El Ayuntamiento de Torremolinos se enfrenta a un nuevo revés en lo que se refiere al servicio municipal de recogida y albergue de los animales abandonados del municipio. El contrato que mantenía con la empresa Home Animals (Canes), desde que en 2011 le fuera retirado a la Asociación para la Protección y Defensa de los Animales Parque Animal tras la detención de su presidenta, Carmen Marín, por parte del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil por el exterminio de animales en las instalaciones, venció el pasado viernes y el concurso público puesto en marcha por el Consistorio quedó desierto. Ninguna de las tres empresas a las que el Ayuntamiento de Torremolinos invitó a presentar ofertas, ni siquiera la que actualmente presta el servicio, formalizó la suya en el plazo abierto en esta primera convocatoria.

Ante esta situación, el equipo de gobierno prevé volver a convocar un nuevo concurso, según fuentes municipales, dentro de un mes para tratar de mantener en activo el servicio que de momento seguirá prestando Canes "en sus mismos términos y niveles que lo hace en la actualidad". Es decir, el Consistorio insiste en que el vencimiento del contrato y la no recepción en plazo de ofertas por parte de empresas del sector al concurso público de adjudicación del servicio no supondrá "la desprotección de los animales" que aún quedan en las instalaciones y de los que se seguirá haciendo cargo la actual adjudicataria.

El área de Medio Ambiente y Salubridad del Ayuntamiento tendrá ahora que darle una vuelta al pliego de condiciones para introducir posibles mejoras a sus cláusulas, y que en el caso del presupuesto de licitación puede suponer el incremento de hasta en un tope legal del 10%. No será tarea fácil encontrar a quien quiera hacerse cargo de un servicio rodeado por la polémica y sometido a una vigilante lupa desde que el Seprona destapó en noviembre de 2010 el sacrificio masivo de los animales que eran depositados en las instalaciones y por lo que la presidenta de Parque Animal ha sido condenada a dos años y nueves meses de prisión.

Fue precisamente a raíz de su detención y la de su más estrecho colaborador, también condenado por los mismos hechos, cuando el Ayuntamiento de Torremolinos entonces gobernado por Pedro Fernández Montes (PP) cedió de forma temporal las instalaciones municipales a Canes que ya prestaba el servicio otros municipios como Mijas. Sin embargo, la concesión sigue estando en manos de Parque Animal, a la que el Consistorio le cedió en 1998 el suelo por un periodo de 50 años y ni siquiera tras la condena dictada a finales del año pasado por el Juzgado de lo Penal número 14 de Málaga ha servido para que el gobierno municipal inicie el rescate de la misma.

La cesión del servicio a Canes estuvo rodeada de polémica desde el principio porque fue Carmen Marín quien pidió al Ayuntamiento que fuera esta empresa la que se quedara con él. Sin embargo, en este tiempo ha intentado lavar la sucia imagen dejada tras los escabrosos episodios protagonizados en Parque Animal y al final ha podido la presión. Al parecer, desde hace un año y ocho meses, la empresa ha mantenido una política de sacrificio cero gracias a la colaboración de dos asociaciones protectoras que le han permitido dar a un buen número de animales en adopción.

Pero, según pudo saber este periódico, los enormes gastos que esta práctica generaba al mantener a los animales en las instalaciones hasta que podían darles salida mayoritariamente al extranjero, y que financiaba en solitario Canes, ha terminado de dar al traste con el servicio. Actualmente, quedan en las instalaciones cuatro perros a los que se les está buscando un hogar, pero que seguirán siendo atendidos por las voluntarias que a diario los visitan y a cargo de la actual adjudicataria que renuncia por ser insostenible.