Vecinos de Puerto Marina se unen para luchar contra el ruido en la zona

"Yo quiero dormir en mi casa y hasta que no pueda hacerlo no voy a parar". Así explicaba un vecino de la zona de Puerto Marina en Benalmádena, Francisco Ruiz, la difícil situación en la que vive desde que hace cuatro años se trasladase a una vivienda en este punto de la costa. Según explica Francisco, el ruido y molestias que sufren tanto él como otros vecinos, debido a los locales de ocio que están situados en los bajos, están provocando graves trastornos tanto de sueño como en sus rutinas diarias.

Por ello, Francisco junto a una treintena de vecinos ha creado una plataforma independiente para luchar contra el ruido en el puerto deportivo. Según explica Francisco, existen quejas documentadas desde hace 15 años, lo que ha provocado que muchos propietarios se "hayan dado por vencidos". En Semana Santa se ha llevado a cabo una campaña de información puerta a puerta para dar a conocer el problema entre los propietarios que pasan sólo las vacaciones en el municipio: "El puerto cuenta con seis zonas distintas y hemos hecho unas 500 fotocopias dando a conocer el problema. Nos hemos sentido desprotegidos", explica el Ruiz.

Los afectados reconocen que en los últimos tiempos ha habido una leve mejoría con respecto a años anteriores, puesto que entre otras medidas se ha limitado la música en las terrazas, aunque ésta no ha sido suficiente. Uno de los principales problemas, según detalla el portavoz, es la existencia de numerosas terrazas, lo que provoca un gran trasiego de gente, y en consecuencia, el jaleo con todo el trastorno que ello supone. Además, a esta situación se suma una denuncia interpuesta por Francisco en un juzgado de Torremolinos al haber recibido amenazas.

De hecho, el portavoz añade que en ningún momento se ha pedido el cierre de los locales "sino que se cumpla la ley". Asimismo, explica que ha enviado decenas de quejas para dar a conocer la situación a distintos organismos, como es el caso del Ayuntamiento o el Defensor del Pueblo Andaluz. Además, Ruiz apostilla que está dispuesto a llegar "a donde haga falta" para poder dormir, aunque asegura que aún "están abiertos al diálogo" con el Consistorio.

Ahora, según informa, el siguiente paso es contactar con los vecinos de la Plaza Solymar para pedir que se unan al grupo, y una vez realizadas todas las reuniones, y si no se soluciona el problema, presentar una denuncia colectiva por vía contenciosa-administrativa contra el Ayuntamiento de Benalmádena "para pedir responsabilidades". De hecho, ya se han puesto en contacto con el mismo abogado que defendió los intereses de los vecinos de El Copo de Vélez-Málaga, los cuales realizaron una denuncia similar que se saldó con una indemnización de 2,8 millones para los afectados.

Por su parte, el Ayuntamiento de Benalmádena ha asegurado que seguirá manteniendo contactos con los vecinos para llegar a un acuerdo, y que se están revisando todas las licencias de apertura para detectar aquellas que tienen irregularidades. Además, fuentes municipales añaden que se van a reforzar las actuaciones policiales.