Adif destina 3,7 millones a reparar los daños en el túnel de alta velocidad del Valle de Abdalajís

El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ha publicado este martes la adjudicación de los trabajos de emergencia para la reparación de las filtraciones en el túnel de la línea de alta velocidad entre Málaga y Córdoba que se encuentra situado en la sierra del Valle de Abdalajís.

En concreto, el anuncio realizado en la plataforma de contratación del sector público recoge un importe de casi 3,4 millones de euros para la realización de las obras. A ello suman 341.000 euros para hacer frente a la dirección técnica de esta intervención. A ello se deberán sumar los correspondientes impuestos que elevarían esta cuantía por encima de los 4,5 millones de euros.

La empresa adjudicataria tendrá que proceder a sustituir las armaduras dañadas, reparar el revestimiento y reponer el drenaje que desalojaba el agua hacia el exterior del tubo. Unos trabajos que se estima que tendrán una duración de unos seis meses.

Las filtraciones en este punto de la línea ocasionaron el cierre de uno de los dos tubos con los que cuenta esta infraestructura. Desde el pasado 22 de julio, fecha en la que ocurrieron los hechos, se mantiene un sistema para permitir la circulación de los trenes de forma alternativa y mantener la circulación en la línea dando doble sentido de circulación al único tubo en funcionamiento. No obstante, este hecho provoca en algunos casos retrasos de hasta 30 minutos en dichas frecuencias.

Las filtraciones se produjeron en este punto tras un periodo de varios meses de lluvias intensas que terminaron por hacer colapsar la estructura interior del túnel. Una infraestructura que ha generado polémica desde su construcción entre 2003 y 2005, ya que aquellos trabajos provocaron la perforación del acuífero que existe en este sierra.

Además, el daño también provocó que desde entonces el municipio que lo acoge afronte problemas de suministro de agua está teniendo que ser asistido mediante camiones cisterna para llenar sus depósitos por el propio Adif. Un problema que se mantiene desde entonces sin una solución definitiva.