En un esfuerzo firme por abordar las crecientes tensiones económicas agravadas por la pandemia y los desafíos persistentes que enfrenta la comunidad, el Ayuntamiento ha anunciado una ampliación sustancial en las ayudas municipales de emergencia social. Este martes, 17 de octubre, marca el inicio del plazo de 15 días naturales durante los cuales las personas en situación de vulnerabilidad económica y riesgo de exclusión social podrán solicitar esta asistencia destinada al pago de alquiler o hipoteca.

El concejal de Asuntos Sociales, Daniel Rivas, recordó la creación inicial de este fondo durante la pandemia del Covid-19, dirigido a residentes empadronados que enfrentaban situaciones de especial vulnerabilidad económica y social. Sin embargo, en una muestra de compromiso continuo con la comunidad, el Grupo Municipal de Gobierno ha decidido no solo mantener estas ayudas, sino también aumentar significativamente la partida presupuestaria destinada a ellas. La cantidad asignada para estas ayudas alcanza la cifra destacada de 134.000 euros.

Una característica notable de esta ampliación es la retroactividad de las ayudas, que ahora cubrirán el año completo, desde enero hasta diciembre. Esta extensión representa un cambio significativo, ya que anteriormente se limitaba a un periodo de 10 meses. Cada persona beneficiaria recibirá un total de 3.600 euros al año, una medida destinada a proporcionar un alivio financiero más sostenible a lo largo del tiempo.

Rivas enfatizó la preocupación creciente ante el deterioro de la situación económica en los últimos años, lo que ha resultado en un aumento progresivo del número de familias que, a pesar de haber accedido a su vivienda habitual a través de financiamiento hipotecario o alquiler, continúan luchando por afrontar adecuadamente el pago de sus préstamos o alquileres.

"Este movimiento representa un alivio financiero inmediato y también una respuesta integral a las complejas realidades que enfrentan las familias en riesgo", destacó el concejal. La decisión de la municipalidad refleja una adaptación proactiva a las cambiantes condiciones económicas que han afectado a numerosos hogares en el municipio.

Con la ampliación de estas ayudas, el Ayuntamiento busca establecer un enfoque a largo plazo para apoyar a las familias en riesgo, reconociendo y respondiendo a las complejidades de su situación.