El dueño del asador recurre el cierre cautelar de su establecimiento

El dueño del Asador Guadalmina, José Eugenio Arias-Camisón, ha presentado un recurso contencioso-administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía por el cierre cautelar que llevó a cabo la Consejería de Salud de su local entre los días 10 y 16 de febrero. El recurso se tramita, según explicaron fuentes del bufete Choclán-Montalvo, a través del procedimiento especial para la protección de derechos fundamentales. Según explican desde el bufete, "se han lesionado los derechos vinculados a la tipicidad, a la legalidad, al proceso con garantías, a la libertad de empresa y a la presunción de inocencia".

Todo nace por el cartel inicial que colocó Arias Camisón al principio de su andadura y que rezaba: "Ante la inminente entrada en vigor de la ley antitabaco (cortina de humo creada por nuestro gobierno para tapar siete años de destrucción masiva en España) les informamos de que, como negocio privado, haciendo uso de lo que nosotros entendemos son nuestros derechos, dicha ley no será aplicada en nuestro establecimiento. Pedimos disculpas a todas las personas que se sientan perjudicadas". Cartel que no retiró hasta que claudicó, el pasado 16 de febrero, cuando se dio el visto bueno para la reapertura.

En el recurso, que fue admitido a trámite como suele ser habitual en estos casos, se indica que "la colocación del cartel es un hecho atípico en cuanto a que no está tipificado como reforma administrativa por la reforma operada por la ley 42/2010", es decir, la ley antitabaco. Sin embargo, "se aplicó la ley general de Sanidad, que en modo alguno debía de aplicarse", según puntualizó Francisco Calderón, miembro del bufete y del equipo que dirige Jorge Choclán en la defensa de Arias Camisón.