Los buitres como atractivo turístico

Buitres en un muladar de Sierra de las Nieves.
Buitres en un muladar de Sierra de las Nieves.
Javier Flores Ronda

29 de junio 2015 - 05:01

Alimentar a las aves con interés conservacionista y poner en marcha una nueva oferta para los amantes de la fotografía, ese es el objetivo del proyecto que ya funciona a pocos metros del refugio de Quejigales, en pleno parque natural Sierra de las Nieves.

De este modo, el espacio natural incorpora unas instalaciones que juegan un doble papel de gran importancia. Por una parte se aporta comida a especies que tienen dificultadas para encontrar alimento en estos tiempos, como es el caso del buitre, y al mismo tiempo se fomenta el turismo de naturaleza y de observación de aves.

El propio delegado territorial de Medio Ambiente y Agricultura, Alfonso Moreno, visitó las instalaciones de este nuevo Hide de la Serranía de Ronda, que será explotado por un emprendedor rondeño, que ha tenido que realizar una inversión de 15.000 euros para la adecuación del espacio de monte que la ha sido concedido para crear esta infraestructura. Para su puesta en marcha también ha recibido una ayuda de casi 5.000 euros por parte de la Junta de Andalucía para fomentar la puesta en marcha de comederos para aves carroñeras y así realizar una eliminación ecológica de subproductos animales no destinados a consumo humano, que reciben la denominación de Sandachs.

La puesta en marcha de las instalaciones ha requerido de la construcción de un camino, cerca perimetral, posaderos, depósitos de agua, contenedor de restos no consumidos y un hide de fotografía, desde el que es posible observar la actividad de las aves que entren al espacio sin ser visto en ningún momento y sin interferir en su vida cotidiana en la naturaleza.

Este espacio está aislado y cuenta con una ventana de espejo que hace que las aves no puedan ver a las personas que se encuentren en su interior, un máximo de 3, además de disponer de varias troneras para introducir los objetivos de las cámaras fotográficas y poder realizar disparos directos, evitando de este modo el cristal.

El precio por poder estar a escasos centímetros de estos espectaculares animales será de 70 euros por una jornada completa para una sola persona, 100 euros para dos y 120 euros si se reserva para tres personas, el máximo permitido. Eso sí, si el día elegido no hay suerte y los buitres, águilas o alimoches son reacios a realizar una visita, los gestores de las instalaciones ofrecen el poder realizar un segundo intento, en este caso sin pagar, en un plazo de un año.

En este punto se espera que también se puedan ver un importante número de pequeñas aves que acudan al abrevadero que se ha colocado justo delante de la caseta, al tratarse de una zona en la que hay poco agua.

La nueva experiencia que ya se puede disfrutar en la Sierra de las Nieves, a pocos minutos de Ronda y en un paraje de gran belleza, no es una novedad en la comarca, ya que otro observatorio y comedero lleva 4 años funcionando en Cortes de la Frontera. Allí, por 20 euros la jornada, pueden observarse milanos, cuervos, buitre leonado, buitre negro o alimoches, explica José Macías, un ganadero de la zona que es el encargo de este punto.

En todos los casos los responsables de estos comederos también se tienen que comprometer a la retirada de los animales muertos cuando le sean notificados, realizando de este modo una importante labor adicional para la naturaleza. A ello unen la obligatoriedad de recoger los huesos de los cadáveres una vez que han sido comidos por las aves.

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