La delegada del Gobierno andaluz en Málaga, Patricia Navarro, destacó este jueves la necesidad de que las administraciones y los responsables políticos “apuesten decididamente por apoyar el tejido empresarial para que sea posible la creación de nuevas iniciativas emprendedoras contra la crisis”. Así lo resaltó Navarro durante su visita a la empresa MasFabEs, ubicada en Pizarra, y que se ha especializado en la fabricación de mascarillas, con una producción mensual que prevé alcanzar los 15 millones de unidades, siendo uno de los elementos esenciales en la lucha contra la actual crisis sanitaria.

Navarro, que estuvo acompañada por el delegado de Salud y Familias, Carlos Bautista, y el alcalde, Félix Lozano, señaló que los responsables públicos “deben ofrecer a los nuevos proyectos empresariales las mayores facilidades para su creación, incluyendo la agilización de trámites administrativos, y en este sentido felicitó al alcalde pizarreño y a su equipo de gobierno por haber facilitado la rápida implantación de MasFabEs en el municipio”. En este sentido, añadió que se trata “de un claro ejemplo del dinamismo que para la economía y el empleo están generando las políticas acertadas de apoyo al emprendimiento del alcalde y su equipo de gobierno”.

“Es una satisfacción poder visitar una empresa en la que la tecnología tiene un protagonismo relevante, con una producción local en un municipio del corazón de la provincia de Málaga, en el corazón del Guadalhorce, una comarca que siempre se ha caracterizado por ser muy emprendedora, muy volcada en la agroindustria”, indicó.

No obstante, apuntó que “ahora ver que se ponen en marcha empresas de este tipo, con tecnología aplicada a la salud, es un orgullo y una magnífica iniciativa, por lo que he trasladado mi felicitación al propietario y los socios”. Navarro puso en valor que las mascarillas que fabrican MasFabEs “tienen un elemento diferenciador único, ya que gracias a su proceso de fabricación incluyen una impregnación adicional de las capas de la mascarilla con tecnología Viroblock, que acaba con cualquier agente vírico en superficie, incluido Covid”. La tecnología Viroblock empezó a aplicarse en 2013 en mascarillas para combatir el virus del ébola.

Los propietarios de la empresa explicaron que las mascarillas producidas cuentan con hasta cuatro capas de filtrado y son únicas en España gracias a sus características duales. La empresa además ha comenzado ya también la venta on line de mascarillas antivirales para que puedan ser adquiridas por los ciudadanos sin que su lugar de residencia sea un problema para ello, apostando de este modo por la digitalización y el comercio mediante su plataforma en internet.

La fábrica dispone de 1.500 metros cuadrados, que se distribuyen en tres grandes estancias: la sala de producción, de 1.000 metros cuadrados, el almacén y la ‘sala blanca’ de 500 metros cuadrados cada uno, así como con una plantilla de 40 trabajadores.