Salud

Una enfermera salva a un bebé que se estaba ahogando al tragarse un plástico en Antequera

  • Elena Becerra no dudó en arrebatar a la pequeña a su madre al percatarse de lo que ocurría

  • El bebé logró expulsar la pequeña tapa de un zumo tras las maniobras que le practicó

Elena Becerra, enfermera de Antequera

Elena Becerra, enfermera de Antequera / M.H. (Antequera)

Elena Becerra, una enfermera antequerana, se convirtió en la mañana de este miércoles en el ángel de la guarda de un bebé al que su madre tenía en sus brazos, presa de un ataque de nervios, mientras gritaba asegurando que se estaba ahogando, en una céntrica calle antequerana.

No obstante, en este momento, el destino quiso que pasase por ese lugar, en la calle Encarnación, esta vecina que se percató del revuelo que había en la zona y que cuando vio lo que estaba ocurriendo no dudó el cruzar la acera y arrebatar al bebé de las manos de su madre para iniciar las maniobras necesarias para tratar de que expulsara el material que su madre aseguraba que se había tragado y que pensaba que era una pequeña pestaña de la tapa del zumo que se estaba tomando el hermano del pequeño mientras se dirigían hacia el colegio, precisamente, del que venía Elena Becerra de dejar a sus hijos.

“No hice otra que cosa que mi obligación”, explica

“Fue algo sin pensarlo”, explica Elena, que considera que no hizo nada especial en ese momento y que fue la reacción instintiva y como profesional de la sanidad ante una situación de este tipo. “No hice otra que cosa que mi obligación”, explica, al tiempo que considera le ayudó el no conocer directamente el bebé y así poder mantener la sangre fría, ya que la pequeña no lograba expulsar el pequeño objeto en forma de tirilla y temía que pudiese entrar en una parada cardiorespiratoria, ya que cada vez estaba más morada, aunque en el último momento expulsó la pequeña lámina y comenzó a recuperar la normalidad.

“En ese momento actué como enfermera, y el prestar servicio en urgencias también me ayudó”, indicó Elena. Y es que, curiosamente, la madre del bebé también es enfermera, aunque en ese momento se encontraba absolutamente bloqueada. “Es normal, en ese momento te comportas como madre”, explicó.

Una intervención que hizo que todo quedase en un gran susto, y es que en algunos momentos temió que pudiese pasar a un grado de mayor gravedad ante la imposibilidad de conseguir que expulsara el plástico, por lo que se había solicitado ya la presencia de una ambulancia que, afortunadamente, no tuvo que completar su recorrido.

Al poco la pequeña había recuperado la normalidad y se mostraba feliz en la puerta del colegio junto a su madre tras dejar a su hermano.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios