El Ayuntamiento de Teba ha finalizado la primera de las seis actuaciones de investigación y excavación que tiene previsto acometer en el conocido Castillo de la Estrella, uno de los símbolos del horizonte del interior de la provincia y que emerge sobre una colina sobre cuyas laderas se asienta su casco urbano en la actualidad.

Miles de piezas están ahora en manos de los expertos para datar su fecha de origen, procedencia o conocer con exactitud los materiales que se emplearon en esta lugar a lo largo de la historia hasta la actualidad. Un trabajo de laboratorio y análisis que estuvo precedido por cuatro meses de trabajo sobre el terreno en el que se descubrió un acceso peatonal hacia el patio de armas, varias estancias y el camino principal de entrada a la fortaleza que se encuentra en la conocida como Puerta de Ronda, una de las grandes desconocidas del espacio.

Estancias descubiertas bajo el manto de tierra.

Bajo varios metros de tierra han aparecido una puerta, escaleras, varias zonas de patio empedradas y lo que parece ser la continuidad de este espacio hacia la zona noble de la fortaleza.

Además, han aparecido numerosos restos de cerámica con el azul y el verde como colores predominantes, restos metálicos, monedas, escayolas que decoraban las paredes y otros elementos que también han permitido saber que dicho castillo también fue utilizado por los franceses y durante la guerra civil, ya que han aparecido una gran cantidad de balines y balas de estas dos contiendas militares.

Un trabajo que es solo el inicio de un plan que en septiembre tiene previsto intervenir en la zona de la iglesia, un espacio que se sospecha que se construyó sobre una antigua mezquita. De igual modo, las excavaciones también se realizarán sobre varias de las viviendas que se tienen constancia que estaban cerca de la iglesia.

Al mismo tiempo también se desarrollarán los trabajos de consolidación del patio de armas, por lo que la intervención arqueológica en esta zona se aplazó hasta el próximo año para no hacerlas coincidir. Precisamente, la excavación del patio de armas se espera que sea una de las que aporte una mayor transformación al modo de ver este espacio defensivo con más de 1.000 años de historia.

Por otra parte, en años sucesivos está previsto intervenir en las viviendas que se tienen localizadas gracias al trabajo del georadar, el entorno de la fortaleza e investigar los siete aljibes que permitían a sus habitantes el poder contar con agua sin necesidad de salir del recinto y gracias a una falla existente en el interior de la sierra que lo acoge.

Un proyecto que espera convertir este recurso en un referente patrimonial de la provincia, para lo que el Consistorio invertirá alrededor de un millón de euros cuando esté concluido, algo que ocurrirá dentro de aproximadamente una década. "Es un proyecto de pueblo, tenemos los apoyos y sabemos que es a largo plazo", indicaba el alcalde de Teba, Cristóbal Corral.