El equipo de gobierno de Manilva, en minoría tras la dimisión de dos ediles

Este mandato tampoco será tranquilo en Manilva. La dimisión ayer de dos concejales de la Agrupación Socialista de Manilva (ASM) ha dejado a la alcaldesa, Antonia Muñoz (IU), a la cabeza de un gobierno en minoría. Los cinco ediles de la coalición de izquierdas, junto a los dos de su socio de gobierno, se encuentran desde ayer en una situación de inferioridad numérica respecto a la oposición, integrada por cuatro concejales del PP, cuatro del PSOE y los dos concejales que han abandonado el equipo de gobierno, que pasan a estar en situación de no adscritos.

Estos dos ediles son Augusto Gil y Yolanda Holgado. El primero fue número tres de la candidatura a las elecciones municipales de la ASM y asumía hasta ahora las responsabilidades en materia de Turismo, Promoción e Imagen y Comercio, entre otras. Por su parte, Holgado, que ocupó el cuarto puesto en la lista independiente, estaba al frente de Cultura.

Según el escrito que presentaron por registro de entrada, abandonan la ASM "como causa y efecto de la imposibilidad de trabajar por las causas que motivaron presentarnos a las elecciones". Los no adscritos añaden que no quieren "formar parte de algo que nos desagrada en extremo" y aseguran que el estilo "que ha adoptado la señora alcaldesa y el nuestro son, afortunadamente, incompatibles". Tanto Holgado como Gil insisten en que no quieren perder "la dignidad" por mantenerse en un cargo político "sin hacer aquello con lo que nos comprometimos".

Ante estos acontecimientos, la alcaldesa de Manilva lamentó que el transfuguismo "vuelva a ser protagonista de la vida política manilveña" y que los "caprichos individuales se impongan para traicionar a los votantes".

Muñoz aseguró que la renuncia de estos concejales le pilló "por sorpresa" y anunció que hará "todo lo posible por mantener la gobernabilidad del municipio a cualquier precio". De momento, IU quiere acercar posturas con el PSOE, liderado por Salvador Zotano, aunque no descarta sentarse a hablar con el PP, formación que tampoco cierra las puertas a este diálogo. Lo que no se plantea la regidora es romper relaciones con lo que queda de la ASM, cuyo líder, Emilio López, mantiene un enfrentamiento constante con el portavoz de los socialistas. López exigió a los ediles dimitidos que entreguen su acta y justificó su decisión en su "debilidad política y personal" y en su "incapacidad para hacer frente a las responsabilidades que les fueron encomendadas".