El municipio incorpora un hotel bodega a su oferta de alojamientos

El enoturismo crece en la Serranía de Ronda y la ciudad del Tajo vuelve a contar con un hotel bodega, el único que se encuentra ubicado dentro del término municipal y pocos kilómetros del casco urbano.

El hotel bodega El Juncal ya tiene abiertas sus puertas, estando enclavado en el mismo la bodega rondeña Lunares, que hace unos días se hacía con el premio Sabor a Málaga al mejor tinto con denominación de origen Sierras de Málaga con su Altocielo 2012.

El alojamiento tienen un claro guiño al mundo del vino, tanto en el interior como en el exterior. En sus alrededores se pueden apreciar unos viñedos y el alojamiento está conectado internamente con la propia bodega mediante la sala de catas, que presenta una gran belleza.

Precisamente, las catas en este espacio, desde el que se puede observar la sala de barricas de la bodega mientras se degustan sus vinos, es una de las ofertas principales del establecimiento, que cuenta con cuatro estrellas y que puede acoger a 35 personas hospedadas en habitaciones de diferente tipo.

En las habitaciones hay también otro guiño al vino, ya que las mismas están nombradas con diferentes tipos de uvas, al tiempo que en la entrada se exponen los diferentes vinos que son elaborados en la bodega.

De hecho, el establecimiento y el hotel coexisten en un mismo espacio, por lo que en tiempos de vendimia los clientes alojamos en el mismo podrán observar el trabajo en bodega, como es el caso de la recepción de la uva y su introducción en bodega desde la mesa de selección.

No obstante, los responsables del alojamiento no solo quieren ceñirse al enoturismo y también cuentan con otro tipo de actividades, como rutas en bicicleta o el acoger reuniones y eventos.

La dirección del hotel, a cargo de la empresaria, Marta Valle, también anunció que a partir de enero se abrirá el restaurante para el público, mientras la zona chill out situada entorno a la piscina en forma de playa está llamada a tener un gran protagonismo, en especial, en la época de verano. De este modo, tras varios años cerrado y un cambio de propiedad, las instalaciones vuelven a formar parte de la oferta turística rondeña, que a lo largo del próximo año también esté previsto que incorpore el segundo hotel de la firma Catalonia junto a la plaza de toros y el Puente Nuevo.