El Pride tiñe de arcoíris las calles de Torremolinos

La manifestación del Orgullo ha contado con el desfile de 21 carrozas y la participación de 100.000 asistentes

21 carrozas participan este sábado en la manifestación del Pride de Torremolinos

Manifestación del Pride de Torremolinos
Manifestación del Pride de Torremolinos / M.H

El Orgullo costasoleño Pride ha teñido este sábado de arcoíris las calles de Torremolinos, con una manifestación que ha contado con el desfile de 21 carrozas y la participación de unas 100.000 personas, siendo un acto en el que el colectivo LGTBI+ se ha reivindicado como una “comunidad orgullosa, diversa y libre”.

La jornada reivindicativa ha comenzado a las 17:00 horas con la concentración en la plaza Blas Infante, a la que han asistido vecinos, visitantes, entidades y autoridades públicas para celebrar el décimo aniversario del Pride de Torremolinos. La alcaldesa de la localidad, Margarita del Cid, ha reivindicado “los derechos humanos, la libertad y la diversidad en una ciudad que ha hecho de estos valores su bandera”.

La regidora también ha destacado Torremolinos como “una ciudad que se reivindica y se defiende ante las agresiones y los delitos de odio”, recalcando que la bandera de “la igualdad, la libertad y la diversidad debe defenderse todos los días” en el municipio, en el que “todo el mundo sea lo que quiere ser”.

La percusión, las pompas de jabón y las banderas arcoíris han tomado la calle pasadas las 18:00 horas, al ritmo de la Batucada Sambagua Do Río, en la reivindicación de la diversidad hecha fiesta en el Orgullo torremolinense, donde vecinos y visitantes se han sumado para acompañar al desfile ataviados de abanicos, banderas, camisetas, calcetines, pulseras o shorts LGTBI.

La serpentina, los arneses, los cueros y algún látex han sido el atrezo, junto con las pistolas de agua para mitigar el calor de junio, de las 21 carrozas al ritmo de música electrónica, muchas de las cuales han contado con temática específica como flamenca, marinera u osos, además de ‘daddy`s’ u hombres mayores o el carruaje de chicas, que sale por segundo año en la ciudad.

La ciudad se ha convertido así por unas horas en una gran discoteca al aire libre, en la que los cláxones de los camiones han amenizado junto con la música electrónica a los vecinos y visitantes, en una marcha reivindicativa que ha contado con la participación de unas 100.000 personas, según las estimaciones de la Policía Local.

Bajo el lema ‘Celebrando todas las identidades, construyendo un futuro en colores’, la marcha ha discurrido por las calles Rafael Quintana Rosado, Europa o Isabel Manoja, donde se ha desplegado una gran bandera arcoíris. El desfile ha proseguido por Pontevedra, Palma de Mallorca, Danza Invisible, Casablanca, Las Mercedes, Río Cañoles, Marqués de Salamanca y de la Cruz para llegar al Centro cultural Pablo Ruiz Picasso.

Comunidad "orgullosa, diversa y libre"

En el espacio cultural, las entidades sociales de diversidad del municipio han leído un manifiesto, alrededor de las 21.00 horas, en el que se ha reivindicado al colectivo LGTBI como “una comunidad orgullosa, diversa y libre”, celebrando “diez años de Orgullo, lucha, visibilidad, amor, fiesta, y sobre todo, dignidad”, ha ensalzado Santiago Rubio, presidente de Colega Torremolinos.

Así, ha defendido la ciudad como “un referente de libertad, diversidad y acogida”, tanto en “tiempos difíciles” como en la actualidad y en el futuro, en un aniversario de “fiesta, memoria y reivindicación”. En este punto, ha incidido en la lucha mantenida por el colectivo a lo largo de las décadas ya que el Orgullo nació de una “revuelta”, remarcando que su “existencia es política, y nuestra alegría, una forma de resistencia”.

“Hoy decimos bien alto y claro ni un paso atrás en nuestros derechos. No al odio, no a la violencia, no al silencio. Sí al respeto, sí al amor y sí a la libertad”, ha exclamado Rubio, quien ha recordado en la jornada festiva a “quienes nos abrieron camino con coraje cuando era peligroso simplemente ser, para los siguen luchando cada día en las calles, en las aulas, en los hogares y en las instituciones, y también para los más jóvenes”.

Matrimonio igualitario

Durante la lectura se ha apelado a la “conciencia”, al cumplirse 20 años del “matrimonio igualitario en España”, ha exaltado por su parte Antonio Ferré, presidente de la Federación Andalucía Diversidad, respecto al reconocimiento legal de una reivindicación histórica del colectivo LGTBI de que “nuestras vidas, familias y compromisos son igual de válidos, dignos y reales”.

Ferré ha aludido a la “inclusión real” abordando aspectos como “el racismo, la migración, la pobreza, de salud mental, el VIH, la diversidad funcional, la infancia y mayores LGTBIQA+”. Al mismo tiempo, ha reivindicado “una vida digna no solo legal”. “Queremos salud, vivienda, trabajo, educación, cuidados y respeto”, ha apuntillado.

De la misma forma, ha exigido que “las leyes LGTBIQA+ y trans autonómicas y estatal deben protegerse, aplicarse y reforzarse”, al ser fundamentales para “garantizar la igualdad real en nuestros barrios, escuelas y vidas”. También ha abogado por combatir “los discursos que intentan invisibilizar o recortar nuestros derechos” con visibilidad, memoria y comunidad.

Una jornada deresistencia, visibilidad y dignidad”

La coordinadora en Málaga de la asociación Apoyo positivo, Gema Garrido, ha reivindicado la defensa de los derechos durante la lectura del manifiesto, rechazando que “el Orgullo se convierta en un escaparate vacío sin lucha ni reivindicación” o “se vacíe de sentido bajo fuegos artificiales y banderas sin compromiso”. Así, ha ensalzado que la celebración “no es solo fiesta, es resistencia, visibilidad y dignidad” que “se construye cada día en la calle, en lo público y en lo común”.

“Queremos un Torremolinos todavía más inclusivo, accesible y libre para todas las personas”, ha destacado respecto al papel referente de la ciudad en la defensa y acogida del colectivo, apostando por un municipio “más comprometido, transformador y valiente”, que “entienda que no hay inclusión sin acción” y donde “todas las identidades tengan lugar”.

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