Con la misma sencillez con la que se expresa, Alfonso Rot plasma sus vastos conocimientos de alfarería en sus obras. Mantiene la misma curiosidad que cuando, con 12 años, descubrió un torno y el buen barro de su pueblo, La Rambla (Córdoba). Sus piezas rebosan honestidad y ofrecen un viaje onírico tan personal como la obra del artista. Estos días expone en la sala Mare Nostrum de La Cala del Moral.

La muestra la componen 66 piezas de cerámica tradicional a las que aplica procesos modernos. Platos, jarrones o centros de mesa ejecutados con la técnica de cristalización. Una forma de tratar el esmalte sobre base de porcelana con la que consigue darle la apariencia de otro material. “Se caracteriza por su dificultad, para aprenderla y para ejecutarla. Hay que entender de componentes para la formulación de los esmaltes y también de cocción de horno. Hay que tener en cuenta, que según el esmalte, alcanzan temperaturas de entre 1.260 y 1.270 grados.

Luego el horno se para descendiendo la temperatura, y comenzamos a trabajar para hacer mesetas creando el cristal y los halos. Lleva muchas capas, muchas temperaturas”, explicó Rot que al descubrir esta técnica que data del siglo XVIII dedicó varios años a estudiar, formular y perfeccionarla para llegar a lo que ya es su firma como maestro alfarero y ceramista.

El artista Alfonso Rot.

“Con la cristalización se consigue la limpieza de las formas y su valor reside en que no hay ninguna igual”, comentó el alfarero cuyas piezas trasladan al espectador o a aquellos que las adquieren a otras galaxias, a mundos exóticos y naturales. El uso de azules como el mar, de verdes bosques o marrones tierras; y los halos que genera la cristalización, contribuyen a ese efecto que hace que su obra sea única y reconocible.

Alfonso Rot imparte clases en el Ciclo Superior de Cerámica Artística en las Escuelas de Arte de Andalucía, pero además tiene una escuela taller en la Brecha. El espacio que el Ayuntamiento de Málaga creó en la plaza Pintor Eugenio Chicano para aglutinar a los artesanos de la capital. Desde allí divulga sus saberes y fomenta el conocimiento sobre la historia y el presente de la cerámica y la alfarería. Lo hace en sus clases y en excursiones a lugares de tradición cerámica. En ellas les habla de las bases de la alfarería, de barros, de esmaltes, engobes, pigmentos y cocciones.

En 2006, realizó piezas para el “arqueódromo” que reproduce el yacimiento fenicio del Cerro Del Villar en Málaga dirigido por el arqueólogo don Juan Manuel Muñoz Gambero. Para el Aula del Mar también ha confeccionado ánforas fenicias, romanas y púnicas. En 2008 ofreció asesoramiento técnico y elaboró piezas de cerámica para el pabellón de Andalucía en la Expo Zaragoza. Concretamente vasijas de agua desde el Neolítico a la Edad Media.

Entre las curiosidades destaca, una tinaja decorada por Carmen del Río como regalo para la boda del Rey Felipe VI con la reina Leticia Ortiz; y el Monumento al Botijo que hizo para su pueblo, cuyo popular recipiente mide 1,70 metros. Otra de sus pasiones dentro de la alfarería es hacer exhibiciones de torno en las calles. Así, se le ha podido ver en países como Francia y Portugal o en ciudades españolas como Barcelona, Bilbao, además de las andaluzas.

Alfonso Rot Estrada, nació en La Rambla, pueblo alfarero situado en la campiña sur de Córdoba. Antes de montar su empresa, trabajó en varias fábricas de cerámica. Fue en 1998 cuando se decidió a hacerlo con su hermano realizando piezas recuperadas de la tradición andaluza pero con diseño propio. Cuenta con una decena de premios en concursos de alfarería tradicional y en los de cerámica.